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La Generalitat clausura una residencia de ancianos en Canet de Mar por no tomar medidas contra la covid

La administración catalana acusa a la propiedad de no seguir los protocolos contra la pandemia

Dos sanitarios ayudan a una anciana en una residencia
Dos sanitarios ayudan a una anciana en una residenciaAlbert Garcia
Alfonso L. Congostrina

La Generalitat de Cataluña ha clausurado, de forma cautelar e inmediata, la residencia de ancianos privada Maricel de Canet de Mar (Barcelona). El departamento de Trabajo, Asuntos sociales y Familias ha tomado esta decisión después de las “graves irregularidades” detectadas por los inspectores de la Generalitat. La administración catalana acusa a la entidad privada que gestiona la residencia de no tener suficiente personal, incumplir los protocolos establecidos con la pandemia del coronavirus y obstaculizar la labor de los inspectores de la administración catalana.

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El cierre se ha decretado de forma inmediata y ha sido comunicado tanto a la dirección del centro, la sociedad limitada Roma i Serra, como a las familias de los 36 residentes que había en la actualidad a los que se les ha garantizado una plaza en otro centro geriátrico.

La Generalitat detectó irregularidades en la Maricel el pasado noviembre. El departamento detectó que no se estaban cumpliendo los protocolos anticovid y abrieron un expediente sancionador a los responsables al detectar hasta cinco faltas muy graves y una grave. Entre los ancianos residentes se detectó un brote de Covid y la Generalitat intervino la residencia y cambio la gestión del centro en favor de Suara Servicios. La nueva entidad al frente de Maricel tomo las medidas necesarias para reducir la situación y garantizar la asistencia y protección de los ancianos.

Tras la intervención de Suara, ahora, no hay ningún positivo por covid y se ha mejorado el funcionamiento del centro. Además se ha aumentado la plantilla y se les ha formado. Pese a ello, y tal y como asegura la Generalitat, la propiedad –Roman i Serra-no se ha comprometido a mantener las soluciones implementadas por Suara ni a facilitar el seguimiento y control lo que ha llevado a la administración catalana a decretar el cierre cautelar de las instalaciones.

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