Feijóo hurga en la fragilidad del Gobierno, pero evita cualquier alternativa con Junts

Como una letanía, Alberto Núñez Feijóo ha vuelto a reclamar elecciones anticipadas a Pedro Sánchez tras su última derrota parlamentaria. Junts per Catalunya tumbó este martes la senda de déficit y en la reforma de la ley de extranjería, y el líder del PP ha argumentado este miércoles ante sus diputados y senadores que la legislatura está acabada: “Esto ya no da más de sí”. “Su mayoría de investidura nunca fue una mayoría de Gobierno”, ha defendido Feijóo sobre el presidente del Gobierno. “Nunca fueron más”, ha reflexionado, “solo tenían menos escrúpulos que los demás”. Con esa tesis, la de que la mayoría de investidura de Sánchez hace aguas, el líder del PP ha pedido de nuevo y de forma solemne un adelanto electoral. “Le pido al señor Sánchez, en nombre de la fuerza mayoritaria, que llame al jefe del Estado y que le diga que convoque elecciones, o que se va”, ha exhortado. No era la primera vez.

Feijóo ya pidió a Sánchez que adelantara las generales el pasado mes de mayo, cuando habían transcurrido solo diez meses de las últimas, y en plena campaña de las elecciones europeas. El motivo que esgrimió entonces fue la ley de amnistía, que estaba en plena tramitación parlamentaria. El anuncio lo hizo en el contexto de la quinta manifestación contra la medida de gracia que los populares habían organizado en las calles de Madrid. Después, en junio, el líder del PP volvió a reclamar un anticipo electoral a Sánchez, en el primer cara a cara que lo enfrentó con el presidente después de las elecciones europeas; una cita electoral en la que el PP ganó por estrecho margen al PSOE. “Déjelo ya, señor Sánchez”, instó entonces al jefe del Ejecutivo. La misma frase la ha repetido este miércoles.

“Señor Sánchez, déjelo ya. Convoque elecciones, váyase, pero así no podemos seguir”, ha instado de nuevo Feijóo en su discurso este miércoles ante los parlamentarios populares. El líder popular ha jalonado su intervención de distintas expresiones sobre el agotamiento de la legislatura, un año después de las elecciones generales del 23-J que permitieron a la izquierda conservar el poder. “España no merece lo que estamos viviendo ni puede soportar más esta situación”, ha defendido. “Estamos ante los últimos coletazos”, ha considerado. Y también: “Esto no es un Gobierno, es un tinglado. Alguien tiene que decirle [a Sánchez] que esto tiene que parar”.

Pese a incidir con todas las fórmulas posibles en la debilidad parlamentaria de Sánchez, Feijóo ha evitado retarle a que se someta a una cuestión de confianza, un instrumento con el que el presidente puede comprobar si revalida o no la confianza del Congreso de los Diputados. El líder del PP no ha pedido a Sánchez que active esta fórmula, aunque su portavoz parlamentario, Miguel Tellado, no la había descartado esta misma mañana. Tampoco ha echado mano de otros instrumentos para censurar al jefe del Ejecutivo, como una reprobación o, en última instancia, una moción de censura. Fuentes de la dirección popular han descartado de forma tajante promover una moción de censura, que dependería para prosperar tanto de Vox como del PNV o Junts per Catalunya, pero sobre todo de los catalanes después de que la formación vasca sellara su alianza con el PSOE en el Gobierno de Euskadi. En el equipo directo de Feijóo dejan la puerta abierta a utilizar otros instrumentos, como la petición de una cuestión de confianza, pero no ahora, sino a la vuelta de las vacaciones de verano.

El PP no quiere gastar balas de oposición en pleno periodo estival, pero los populares también dudan sobre qué haría Junts per Catalunya ante un hipotético escenario de tener en su mano una censura a Sánchez. Feijóo ha destacado hoy que el partido catalán le “tumbó todo” este martes al Gobierno, en “una humillación total”, pero después tampoco ha dado por hecho que si ERC pacta con el PSC investir a Salvador Illa como presidente de la Generalitat, Junts retirará su apoyo parlamentario al Gobierno. “Si consigue los votos de la investidura en Cataluña”, ha reflexionado sobre Sánchez, que precisamente estaba hoy en Cataluña reuniéndose con el president Pere Aragonés, “quizá pierda los votos para gobernar España”. Pero quizá no es lo mismo que seguro, así que el PP opta de momento por no ponerse en manos de Junts.