Luz verde al nuevo carné para que los jóvenes de 16 años puedan conducir hasta a 90 kilómetros por hora

A partir del año próximo, si las previsiones de la Dirección General de Tráfico (DGT) se cumplen, los jóvenes de 16 y 17 años podrán conducir coches eléctricos de una potencia y velocidad máximas de 15 kilovatios y 90 kilómetros por hora, el doble de lo permitido hasta ahora para esa edad. Para hacerlo tendrán que obtener el nuevo permiso de conducción B1, un tipo de carné intermedio ―entre el AM y el B― contemplado en el marco europeo desde 2006 e introducido ahora en la Estrategia de Seguridad Vial 2030 de la DGT. La estrategia ha sido presentada este jueves por el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en un acto en Madrid. La DGT prevé que ese nuevo carné, que requiere modificar el Reglamento de los Conductores, entre en vigor a lo largo de 2023, una vez se hayan especificado los requisitos necesarios para su obtención y el Consejo de Ministros lo apruebe definitivamente.

La medida, no exenta de polémica por la alta velocidad que pueden alcanzar los vehículos a los que accederán los menores, pretende promover la movilidad de los jóvenes en el entorno urbano y aumentar las opciones “en áreas de menor densidad de población”, según el ministerio. De hecho, en varios de los países en los que ya funciona, sobre todo en Francia, su implantación responde a las necesidades del mundo rural.

“Facilita que el contacto con la seguridad vial se produzca antes, pero también entraña riesgos”, analiza Enrique Francisco Lorca, presidente de la Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE). “Tiene que haber una buena formación”, advierte. Aunque todavía no se han fijado los requisitos necesarios para acceder a él, Lorca considera fundamental que, además de realizar un examen teórico, los candidatos se sometan a un examen práctico “en vías abiertas”, es decir, en las propias carreteras, y no solo en pistas cerradas como ocurre con el permiso A1, que habilita ya a los menores para conducir motocicletas. “Es importante que se enfrenten a la circulación a la que luego van a entrar”, considera este profesional, “porque van a alcanzar una velocidad más que razonable”.

En la actualidad, los jóvenes de 16 y 17 están autorizados a conducir motocicletas (con el permiso A1) y cuadriciclos ligeros que llegan a los 45 kilómetros por hora (con el AM). A partir de 2023, si se cumplen los plazos previstos, podrán ponerse también al volante de vehículos de mayor cilindrada y alcanzar velocidades de hasta 90 kilómetros por hora. Aunque el elevado precio de los coches eléctricos hace pensar a los expertos que el uso de este nuevo carné será limitado, lo que más preocupa es la seguridad. Por un lado, aumentaría la protección de los conductores menores si se implanta como alternativa a la moto, ya que el cuerpo quedaría cubierto. Pero, por el otro, un atropello de uno de estos vehículos entrañaría muchos más riesgos para el peatón que el de una moto.

Reducir a la mitad las muertes en carretera

Además del nuevo permiso B1, la Estrategia de Seguridad Vial 2030 presentada este jueves recoge una batería de medidas que servirán de marco de referencia nacional durante la próxima década y que están encaminadas a reducir a la mitad el número de muertes en carretera. En lo que va de año, 439 personas han muerto en accidentes de tráfico, 24 mas que en los cinco primeros meses de 2019. Estas son las novedades más importantes:

Renovación de los permisos de conducir. Los plazos de renovación se ampliarán en el caso de los conductores jóvenes y se reducirán en el de los mayores.

Mayor regulación de los vehículos de movilidad personal. Se establecerán parámetros para el uso de este tipo de vehículos (por ejemplo, los patinetes eléctricos), como una edad mínima, el uso obligatorio del casco, el equipamiento o el seguro obligatorio para proteger a los usuarios vulnerables. Se hará en coordinación con los ayuntamientos.

Nuevo título de Formación Profesional. Entrará en vigor el curso que viene y otorgará el título de Técnico Superior en Movilidad Segura y Sostenible. Permitirá ser profesor de autoescuela.

Cursos para sumar puntos al carné. Los conductores podrán sumar dos puntos extra al carné siguiendo un curso de conducción segura y eficiente. Está previsto que esos cursos ―que se añadirían a los que ya existen para recuperar puntos perdidos por infracciones― se aprueben a finales de este año.

Actualización del examen psicotécnico. Se harán en los Centros de Reconocimiento de Conductores, en colaboración con el Ministerio de Sanidad y la Sociedad Española de Medicina del Tráfico.

Cursos para trabajadores en moto. La Fundación para la Formación en el Empleo (Fundae), a petición de la DGT, ha incluido en su catálogo de cursos bonificados esta materia para que las empresas puedan ofrecérselos a sus trabajadores que usen moto.

Promoción del airbag para motos. Será obligatorio el uso de chaleco-airbag en las pruebas de circulación para obtener el permiso A de conducción de motos, y la adquisición de airbag para los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil.

Nuevo catálogo de señales. Se renovará el catálogo de señales, tanto verticales como horizontales, urbanas e interurbanas.