Los cinco jueces que decidirán si se investiga a Pablo Iglesias

Cinco magistrados de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo deberán decidir si se abre una investigación contra el vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, por revelación de secretos, daños informáticos y denuncia falsa en el llamado caso Dina. El pasado miércoles el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón envió al alto tribunal una exposición razonada en la que apreciaba que hay indicios suficientes para citar a Iglesias como imputado por supuestamente apoderarse durante meses de una tarjeta de teléfono móvil que había sido robada a su colaboradora Dina Bousselham y parte de cuyo contenido había sido publicado en el digital OK Diario.

El juez García-Castellón considera que los pantallazos de conversaciones de dirigentes de Podemos que fueron publicados por ese medio digital fueron enviados a alguien por Bousselham en una época anterior a la sustracción de su teléfono, y que Pablo Iglesias y los líderes de Podemos usaron la denuncia del robo para hacerse pasar por víctimas de las cloacas policiales que se investigan en el caso Villarejo.

La Sala de Admisión del Supremo está formada por el presidente de la Sala, Manuel Marchena, y los magistrados Andrés Martínez Arrieta, Andrés Palomo, Ana Ferrer y Eduardo de Porres. Estos son sus perfiles.

- Andrés Palomo. El ponente. Andrés Palomo (1954) ingresó en la carrera judicial en 1981 y pertenece desde hace seis años a la Sala de lo Penal. El encargado de redactar el auto de admisión, o no, de la causa contra Pablo Iglesias, no está afiliado a ninguna asociación judicial. Entre 1998 y 2004 fue presidente de la Audiencia Provincial de Segovia y antes ejerció en Salamanca y Extremadura.

- Andrés M. Arrieta. El veterano. Andrés Martínez Arrieta (1955) es el magistrado más veterano de la sala de admisión: ingresó en la carrera en 1979 y en el Supremo en 1998. En ese momento fue el magistrado más joven en acceder al alto tribunal. Afiliado a la centrista Asociación Francisco de Vitoria, Arrieta presidió la sala que recientemente confirmó la inhabilitación del expresidente catalán Quim Torra.

- Ana Ferrer. Pionera progresista. La magistrada Ana Ferrer (1959) fue la primera mujer en convertirse en magistrada de la Sala de lo Penal del Supremo (2014). Afiliada a Juezas y Jueces por la Democracia, Ferrer fue presidenta de la Audiencia Provincial de Madrid y es vocal permanente de la Comisión General de Codificación, órgano que asesora al ministro de Justicia en la preparación de leyes.

- Manuel Marchena. El presidente. Tras dirigir el juicio del procés, cuya sentencia también redactó, es, quizá, el magistrado más conocido de España. Marchena (1959), fiscal de carrera, ingresó en la Sala de lo Penal del Supremo en 2007 y alcanzó la presidencia en 2014. Ha sido profesor asociado en la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Madrid. No pertenece a ninguna asociación judicial.

- Eduardo de Porres. El más reciente. El magistrado Eduardo de Porres accedió en julio de 2018 a la Sala de lo Penal para cubrir la plaza que dejó Cándido Conde-Pumpido al pasar al Tribunal Constitucional. De Porres, que fue abogado antes de ingresar en la carrera en 1986, fue presidente de la Audiencia Provincial de Madrid y acumula una amplia experiencia docente en materia de derecho procesal.