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Volver y tocar con seguridad para todos

La Real Filharmonía de Galicia reaparece en público tras cuatro meses de parón por la covid-19

Concierto de la Real Filharmonía de Galicia en una imagen cedida.
Concierto de la Real Filharmonía de Galicia en una imagen cedida.xaime martín

Vuelve la música sinfónica a Santiago, con la reaparición de la Real Filharmonía de Galicia ante el público compostelano. El regreso se producirá en un concierto con el que se dará fin al ciclo Matinais Clásicas, promovido por la Fundación Cidade da Cultura, en el que diferentes grupos han venido actuando en el Museo del Gaiás.

Se cierra así el parón de cuatro meses, obligado por la crisis sanitaria creada por la pandemia del coronavirus. La orquesta gallega será dirigida por su titular, Paul Daniel, en un programa que viajará desde Mozart a Granados, pasando por Beethoven y Joam Trillo. El concierto comenzará con la obertura de Las bodas de Fígaro, Kv 492 de W. A. Mozart (1756 - 1791), ópera estrenada en Viena el 1 de mayo de 1786 bajo la dirección del propio compositor y primera de la trilogía escrita en colaboración con Lorenzo da Ponte.

La segunda obra del concierto será la Sinfonía nº 8 en fa mayor, op. 93 de Ludwig van Beethoven (1770 - 1827). Compuesta en el verano de 1812, la Sinfonía nº 8 de Beethoven es la culminación de sus sinfonías instrumentales. Es como una puesta en sonido de la perfección de lo sencillo y todo en ella parece fácil. Sin embargo, la diferencia entre el manuscrito definitivo y los escritos meses antes demuestra que tal “facilidad” es fruto de la gestación bien complicada de una obra que eleva nuestro espíritu en su alegre ligereza, al tiempo que nos arrolla por la fuerza que la recorre de principio a fin. Fue estrenada en Viena el 27 de febrero de 1814.

El concierto continúa con Moinhada, obra contemporánea del gallego Joam Trillo (1942 - colaborador habitual de la Real Filharmonía de Galicia-, estrenada en octubre de 2011 en el acto “Galego do ano”, para culminar con el Intermezzo de Goyescas, de Enrique Granados (1867 – 1916), en orquestación de Ernest Martínez.

Este intermedio forma parte de la obra maestra del compositor catalán fallecido en el hundimiento del S.S. Sussex, torpedeado por un submarino alemán durante la Primera Gran Guerra. Este trágico final fue debido al empeño del presidente estadounidense Woodrow Wilson en escuchar en la Casa Blanca un recital de Granados tras el éxito de Goyescas en Nueva York, lo que hizo cambiar sus planes de viaje al músico leridano.

El concierto tendrá un aforo limitado a 100 personas y se desarrollará respetando las últimas medidas adoptadas por las autoridades sanitarias. En este sentido, habrá una separación de dos metros entre los asistentes, excepto convivientes y será obligatorio el uso de mascarilla durante todo el concierto. También habrá gel hidroalcohólico en la entrada y esta se hará directamente al primer piso del museo. Tanto esta como la salida se harán de forma ordenada a fin de evitar contacto entre los asistentes. Los músicos de la RFG han sido instruidos en las normas de seguridad a seguir durante el desarrollo del concierto.

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Sabela García Ponte, directora técnica de la Real Filharmonía, declara que en esta vuelta al escenario “hay que ser conservadores porque se trata de la seguridad de todos, músicos y público”. En este sentido los planes de trabajo para la próxima temporada “son flexibles y se irán adaptando a las circunstancias sanitarias y la normativa vigente”. Por ello, la previsión es que “en principio se vendan abonos trimestrales y se tengan en cuenta las normas de ocupación y aforo” que en cada momento decrete la autoridad sanitaria.

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