Un árbitro para descongelar el dinero venezolano

España ha encontrado destinatario para el dinero venezolano que permanecía bloqueado desde hace meses en el Banco de España. Será la Organización Panamericana de la Salud, organización especializada en sanidad pública en el continente y vinculada a la Organización Mundial de la Salud (OMS), la receptora de 2,5 millones de euros congelados en el organismo español como remanente de una cuenta del Banco Central de Venezuela que se cerró hace meses. La bicefalia que vive Venezuela desde hace más de un año —con Juan Guaidó como presidente encargado de convocar elecciones y Nicolás Maduro como presidente de facto— había impedido hasta ahora este desembolso. El Gobierno español confía en que el ejemplo cunda en otros países con situaciones parecidas.

La inesperada tregua a la que llegaron hace unos días el Gobierno y la oposición para luchar contra la pandemia en Venezuela comienza a dar resultados. La elección de un organismo neutral en medio de un enfrentamiento abierto entre chavistas y partidarios de Guaidó permite por primera vez interactuar oficialmente con el país sin desairar a ninguna de las partes en liza. “España ha transferido a la Organización Panamericana de la Salud, con el acuerdo de los venezolanos implicados, recursos venezolanos congelados en nuestro país”, anunció este viernes la ministra de Exteriores, Arancha González Laya.

Con este gesto, España pretende servir de guía en “situaciones similares que se están dando en otros países”, explican fuentes diplomáticas. Se trata del segundo país, después de EE UU, que ha encontrado ese tipo de encaje para restituir fondos públicos de Venezuela que permanecían congelados por las dudas sobre la titularidad legítima de esos fondos, detallan las mismas fuentes.

El remanente hasta ahora custodiado por el Banco de España procedía de una cuenta que había abierto hacía años el Banco Central de Venezuela para pagos públicos en España (por ejemplo, a los diplomáticos venezolanos). Las autoridades venezolanas cerraron esa cuenta hace pocos meses, pero el remanente no se había devuelto.

Contactos discretos

Para resolver la situación, la diplomacia española entró en contacto “de manera discreta” con representantes del Gobierno de Maduro y de Juan Guaidó para comprobar la acogida de esta solución. Las dos partes la respaldaron y el dinero está ya en poder de esta organización de Naciones Unidas, clave en el entendimiento que han forjado las dos partes para luchar contra el coronavirus. “Se trata de que recursos que pertenecen a los ciudadanos venezolanos sean empleados en la respuesta a la pandemia por una organización multilateral que los gestionará de acuerdo con los principios que deben regir la ayuda humanitaria”, argumentan en Exteriores.

El movimiento no afecta al dinero venezolano que permanece congelado en Europa como consecuencia de las sanciones que la Unión Europea aplica desde finales de 2017. El club comunitario tiene vetada la entrada y congelados los activos de 25 altos cargos del régimen de Nicolás Maduro a los que considera responsables de la represión en el país. Ese dinero, que Bruselas nunca ha querido cuantificar, permanece bloqueado y de momento no hay perspectivas de restitución.

Fuera de esta iniciativa —más simbólica que cuantiosa—, el Gobierno español confía en que los contactos políticos puedan volver a retomarse en el seno del grupo de contacto que promueve la Unión Europea para acabar con el bloqueo en el país. La emergencia del coronavirus ha frenado estos contactos en los últimos meses, pero las autoridades comunitarias creen que podrá celebrarse una reunión pronto. España quiere desempeñar un papel destacado tanto en este proceso como en las soluciones de carácter humanitario, aunque los avances son escasos. El Gobierno organizó con la Unión Europea una conferencia de donantes hace unos días que logró recaudar 2.500 millones de euros, aunque casi todo el dinero fueron préstamos.