Kumano Kodo, el Camino de Santiago japonés
El Camino Kumano, también conocido como Kumano Kodo, es uno de los caminos de peregrinación más populares de todo Japón. Y, a diferencia del Camino de Santiago, solo puede realizarse a pie
Durante más de 1.000 años, miles de personas en Japón, sin importar la edad o el nivel social, han realizado la ardua tarea que supone el Camino Kumano, un recorrido, o más bien, una red de senderos que atraviesan la región meridional de Kansai, la que solía ser el centro político y cultural de Japón durante muchos siglos y que incluye ciudades tan conocidas e importantes como Kioto, Osaka, Nara y Kobe.
La historia de Kumano Kodo
Los kodo eran antiguos caminos que, desde 2004, pertenecen a la lista de patrimonio mundial de la Unesco, y son las únicas rutas de peregrinación, además del Camino de Santiago, que han sido condecoradas con esta distinción. Como curiosidad, hay que añadir que Kumano y Santiago se encuentran hermanados desde 1998.
Estas rutas estaban (y están) pensadas para que la población pudiera desplazarse entre las áreas sagradas de la península de Kii. En el centro de esta zona religiosa se encuentran los tres santuarios de Kumano más importantes: Hongu Taisha, Hayatama Taisha y Nachi Taisha, conocidos colectivamente como Kumano Sanzan.
La historia de Kumano Kodo se remonta siglos atrás, ya que durante milenios se ha considerado a la región montañosa de Kumano como la mítica “tierra sagrada donde moran los dioses”. Fue en el periodo Heian (794-1185) cuando la casa imperial y la corte emprendieron este arduo viaje de 30 a 40 días desde la antigua capital de Kioto hasta esta zona remota, en busca del paraíso en la tierra. Por eso, se establecieron aquí los Kumano Sanzan, los tres grandes santuarios y el templo Nachisan Seiganto-ji.
En la primera fase de este periodo, el Heian, la fe de Kumano se fue extendiendo desde la familia imperial y la aristocracia hasta la clase guerrera samurái y, poco a poco, fue calando en todos los estratos sociales. Acudió tanta gente que la peregrinación llegó a conocerse como la “marcha de las hormigas a Kumano”. La fe hacia Kumano hizo que fuera un camino sin clases sociales, abierto a todos, sin importar el sexo ni la condición de los peregrinos. A día de hoy, es también un camino accesible para personas con discapacidad, con más de 3.000 santuarios que dan la bienvenida a todo el que quiera.
Además, otra de las cualidades que lo distingue de cualquier otro camino en el mundo es su espiritualidad, ya que a lo largo de sus 250 kilómetros existen numerosas paradas para venerar a las distintas religiones. También se puede apreciar esa espiritualidad en el paisaje, que ha dotado durante todos estos siglos de un aura misteriosa al recorrido.
Los senderos más famosos de Kumano Kodo
Kumano Kodo ha acogido los últimos 10 siglos a todo tipo de personas en las montañas Kii; todas ellas seguían alguna de las siete rutas que existen actualmente: Nakahechi (la ruta principal), Ohechi, Kohechi, Iseji, la ruta Choishi-michi que une el sagrado templo budista Shingon Koyasan con los santuarios de Kumano, y la ruta Yoshino y Omine, un sendero montañoso aislado y traicionero reservado para prácticas ascéticas, y recomendado solo para excursionistas expertos.
En 2004, la mayoría de estas rutas, excluida una ruta moderna llamada Kiiji, fueron incluidas en la lista de la Unesco. Lo que dice, precisamente, la organización es que estos sitios forman un paisaje cultural que refleja la fusión del sintoísmo y el budismo, y una tradición persistente y bien documentada de montañas sagradas mantenida durante más de 1.200 años.
La ruta de peregrinación de Nakahechi, la más popular y concurrida de todas las rutas del oeste de Japón, comienza en Tanabe, en la costa occidental de la península de Kii, y atraviesa las montañas hacia el este, en dirección a los grandes santuarios de Kumano. Quizá su éxito radique en que, a partir del siglo X, fue la ruta más utilizada por la familia imperial en su peregrinación desde Kioto. Este sendero cuenta con alojamientos tradicionales en pueblos a lo largo del camino y es excelente para caminatas de varios días. Además, el tramo entre Takijiri Oji y Hongu tiene unos 30 kilómetros y se puede recorrer en una cómoda caminata de dos días con una parada nocturna en Chikatsuya Oji, donde hay algunos minshuku, algo así como unos bed&breakfast japoneses. El sendero termina con un descenso a Hongu Taisha y ofrece una vista espectacular de la enorme puerta torii del santuario.
La ruta de Ohechi es la que sigue la costa desde Tanabe a Nachi Taisha, uno de los tres grandes santuarios del Camino Kumano. Aunque es un sendero que ha ido desapareciendo con el tiempo, debido a la construcción de carreteras, se estima que fue uno de los más importantes entre los siglos X y XV, y que junto con Nakahechi y Kohechi vieron pasar a más de 30.000 personas cada año. Concretamente, su hermoso paisaje atraía a muchos escritores y artistas, sobre todo durante en el periodo Edo (1603-1868).
Para llegar al santuario de Ise, en la prefectura de Mie, hay que escoger el sendero de Iseji, que al igual que Ohechi es una gran ruta costera que ha ido desapareciendo en favor de la construcción de carreteras para conectar todos los pueblos de la zona. Por ese motivo, solo quedan algunas pequeñas secciones de piedra y tierra del que fuera el antiguo Camino Kumano; sin embargo, sigue siendo muy pintoresco por su diversidad de bosques de bambú, arrozales, montañas y playas. Entre ellos, los más bonitos son el paso de Magose, en la ciudad de Owase, y el paso de Matsumoto, en la ciudad de Kumano. Iseji fue ampliamente transitado en el periodo Edo (1603-1868) porque muchos peregrinos querían llegar al santuario de Ise-jingu. Después de rendir homenaje en Ise, los devotos continuaban por la ruta hasta Kumano.
De todos los caminos, el más desafiante y peligroso es Kohechi, que atraviesa el centro de la península de Kii de norte a sur, uniendo el complejo de templos budistas de Koyasan y el Kumano Sanzan. Se caracteriza por senderos empinados que zigzaguean por los valles, por lo que hay que estar preparado y contar con experiencia en este tipo de terrenos. En total se cruzan tres pasos de más de 1.000 metros de altitud a lo largo de sus 70 kilómetros de longitud. Kohechi fue utilizado principalmente por monjes del complejo de templos del monte Koya.
Por su parte, la ruta de Omine Okugate conecta Kumano con Yoshino a través del monte Omine, tratándose de una de las más largas, difíciles, y también peligrosas, de Kumano, debido, sobre todo, a sus montañas encrespadas y a que prácticamente no aparecen pueblos en el recorrido.
Los lugares más emblemáticos de Kumano Kodo
Dentro del recorrido hay lugares especialmente simbólicos como el gran santuario Kumano Hongu Taisha, uno de los tres santuarios más importantes de la peregrinación de Kumano Kodo. Originalmente, estaba ubicado en Oyunohara, un banco de arena en la confluencia de los ríos Kumano-gawa y Otonashi-gawa, pero fue trasladado debido a las inundaciones de 1889.
La puerta torii del santuario de Oyunohara marca la ubicación original, y es una de las más grandes de todo Japón con más de 33 metros de altura y 42 metros de ancho. Esta estructura monolítica simboliza la división entre el mundo secular y el espiritual; y, además, marca la entrada a una zona sagrada.
El segundo de los tres grandes santuarios que se pueden alcanzar en este camino es el santuario Kumano Hayatama Taisha, que está enclavado en el bosque y alberga una conífera sagrada, la más grande de todo Japón. Nachi Taisha es el tercero de los tres grandes santuarios situado a mitad de camino de la montaña Nachi, a unos 350 metros sobre el nivel del mar. Su origen religioso se remonta al antiguo culto a la naturaleza de Nachi-no-Otaki.
Además de los tres grandes santuarios, son importantes y resaltables en la ruta el templo sagrado de Seiganto-ji con las espectaculares vistas de las cataratas de Nachi, el bosque primigenio de Nachi y el océano Pacífico. Así como la cordillera de Kii, las montañas sagradas y el santuario de Oji, donde los peregrinos suelen descansar y realizar ritos de purificación y orar.
Cómo llegar a Kumano Kodo
La mayoría de viajeros inician el viaje desde Tanabe, que es el punto más accesible para llegar a Kumano, llegando primero al aeropuerto de Nanki-Shirahama desde Tokio o Kioto. Como indican, desde la página oficial del Camino Kumano, desde Shirahama o Tanabe, hay autobuses que te llevan hacia el área de Hongu por la autopista 311, desde donde puedes llegar a los puntos principales de Kumano. También es fácil llegar en tren; además, la mayoría de las líneas ferroviarias transcurren por la costa, por lo que los paisajes están asegurados.
En cuanto a la climatología de esta zona montañosa, es fría durante los meses de invierno, de enero a marzo. Sin embargo, el resto del año la mayoría de las temperaturas son agradables. En agosto hay mucha más humedad, y las lluvias son más intensas de mayo a agosto.
¿Te gustaría recorrer Kumano Kodo de la mano de un guía experto? Únete al gran viaje que realizarán el próximo mes de mayo de 2025 EL PAÍS VIAJES y el fotógrafo y documentalista navarro Patxi Uriz, que ha transitado y fotografiado estos caminos de peregrinación de Kumano, no solo como una forma de llegar a estos santuarios sino al mismo tiempo tratando de comprender la experiencia espiritual que encierran, viviendo la conexión con la naturaleza y adentrándose en la cultura tradicional y milenaria nipona. ¿Le acompañas nuevamente? En este enlace puedes obtener más información.
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