Londres para degustar

Sea verdaderamente británica, o por el contrario importe delicias foráneas, con especial tendencia hacia las propuestas asiáticas (tailandesas, indias, vietnamitas, japonesas, malayas, coreanas... ¡hasta afganas!), la vertiente gastro de Londres nunca ha cautivado, erróneamente, al grueso de los viajeros. El reconocimiento internacional vía Guía Michelín puede presuponer, también engañosamente, que la alta cocina londinense alcanza tal distinción por exclusiva.

Mitos, ambos, que ha logrado tumbar, en parte, el exitoso London Restaurant Festival (www.londonrestaurantfestival.com), una cita anual que aproxima las mejores cartas de la ciudad al gran público. No solo porque los grandes chefs cocinen a precios asequibles durante unos días, sino porque el evento enroló a más de 800 restaurantes de todo tipo de cocina y caché el pasado mes de octubre. Mientras se cocina la próxima convocatoria, ruta por cinco excelentes propuestas descubiertas al abrigo de la última edición del London Restaurant Festival.

01 Barra libre de champaña

Hace 115 años y algunos meses que a Oscar Wilde le aguaron la juerga en los salones del Cadogan Hotel, de los que era asiduo. Indecencia manifiesta, regada con champaña, que le valieron un arresto hoy conmemorado por este exclusivo hotel del barrio de Knighstbride. Aunque la fecha no sea redonda, no hay razón para no homenajear la histórica (y carcelaria) anécdota, por lo que cada sábado y domingo el comedor de Langtry's, restaurante del Cadogan, ofrece el Champagne Lunch, un exquisita y asequible propuesta con la firma del chef Oliver Lesnik, regada con barra libre (si se desea) de Perrier Jouët, las burbujas preferidas de Oscar. El precio oscila entre 35 y 45 libras, según el espumoso escogido.

» www.langtrysrestaurant.com

02 Imaginación y buena despensa

La tranquilidad de St John's Square, en el barrio de Clerkenwell, se cuela en el salón principal de The Modern Pantry, restaurante distribuido entre las dos plantas de un elegante edificio georgiano, de renovado aspecto exterior e interior. En la carta, que se renueva a diario gracias a la inagotable imaginación de la chef Anna Hansen, se ofrece un delicioso ejercicio de combinación y fusión de sabores, pero sin renunciar a los ingredientes puramente británicos; un toque moderno a la despensa de toda la vida, a precio moderado.

» www.themodernpantry.co.uk

03 Un 'bistrot' británico

El lujo gastronómico resulta asequible en Le Café Anglais. Estandarte de la cocina británica moderna gracias a su fundador y chef Rowley Leigh, este restaurante de Kensington acerca la ostentación culinaria al gran público con menús a 20 libras. De evidente inspiración francesa, la cocina tradicional británica muestra una renovada propuesta gracias al ingenio de la factoría Leigh, crítico gastronómico del Financial Times y divertido anfitrión del Big Quiz durante el pasado London Restaurant Festival: un exigente concurso que puso a prueba, entre plato y plato , la sabiduría culinaria de los comensales. Conducido por Anne Robinson, conocida periodista y presentadora de la BBC, premió a la mesa ganadora con un día entre los fogones de este bistrot inglés, junto al propio Rowley Leigh.

» www.lecafeanglais.co.uk

04 Costillas de cinco estrellas

La sala de las costillas no responde a un rudo comedor de carne a la brasa, sino al refinado restaurante del hotel Jumeirah Carlton Tower, en Knighsbridge. The Rib Room renovará sus interiores en 2011, actualmente decorados con la obra pictórica del polaco Feliks Topolski, pero sin retocar la exquisita propuesta de su carta: recetas tradicionales de elegante presentación entre las que reinan, precisamente las costillas asadas de ternera escocesa.

» www.jumeirah.com

05 Rasa Sayang

La oferta de gastronomía asiática que se despliega por toda la ciudad, envidiada en otras capitales europeas por su amplitud, variedad y asumibles precios, cuenta con una exótica propuesta en el número cinco de Macclesfield Street, en Chinatown: auténtica cocina de Malaisia y Singapur compone la carta de Rasa Sayang, y ofrece desde platos sueltos a cinco o seis libras, hasta combinaciones con diferentes especialidades a modo de degustación entre 12 y 15 libras, sin bebida. Conviene incluir, no obstante, alguno de sus deliciosos zumos tropicales en el pedido, debido a lo sabroso pero también potente de la gastronomía malasia.