El nuevo 'soho' de Zúrich

Freitag es un curioso establecimiento, una tienda que luce una torre construida con 26 contenedores y en la que se encuentran los últimos complementos de moda diseñados por Markus y Daniel Freitag. Está en la plaza de Escher Wyss, en la zona industrial de Zúrich, libre de chocolaterías y casi bancos. Situado en el Distrito Quinto, entre el río Limmat y la inmensa estación de Hauptbahnhof, este barrio que aún se conoce como el Industriequartier, ha transformado en los últimos años sus fábricas en lugares de vanguardia donde se mezclan el arte, la cultura, la moda, la restauración y la vida nocturna descubren.

La antigua fábrica de motores de barco, Schiffbau, alberga en la actualidad salas de teatro, el romántico restaurante LaSalle; uno de los mejores locales de jazz, Moods; y el famoso lounge Nietturm Bar desde el que observar toda la zona oeste.

De la revolución industrial a la cultural

Otro ejemplo de la transformación de esta zona es el centro comercial Puls 5, que conserva la estructura arquitectónica de la antigua fundición de barcos, y siempre cuenta con tiendas a la última y un club de fitness, además de interesantes exposiciones. Y el arte contemporáneo internacional y nacional tienen su hueco en Kunsthalle, mientras que en el Gestaltung o Museo del Diseño de Zúrich existe una variada muestra de arquitectura, muebles, gráficos, carteles y esculturas, ente otros objetos.

El arte también está en las paredes, muchas de ellas decoradas con pintadas en cuyas esquinas aparece también la frase -como si de un logo se tratase, Ghost city. Y es que esta antigua zona, testigo de la revolución industrial, se ha convertido en la zona de moda.

La Rote Fabrik, símbolo de la lucha por la libertad de la década de los 80, es hoy un centro cultural que ofrece conciertos, representaciones teatrales, conferencias o proyecciones de cine. Además, alberga el periódico del barrio.

De marcado ambiente universitario, este barrio cuenta con numerosos establecimientos donde se puede comer a precios asequibles como Aubrey, o la comida japonesa del Nooch Steinfelsareal. Además, se puede visitar la zona del HBS Handelsschule KV Business College en cuyo edificio se encuentran 12 salas de cine resguardadas por varios edificios de viviendas más modernos. En los bajos de estos edificios hay locales para jugar a los videojuegos, Gametown, o una inmensa sala de billares, Billardino, entre otros.

Se puede empezar la noche con una cerveza en 4 AKT para luego tomar unas copas en el Labor bar, el local donde algunas celebrities suizas celebran sus fiestas y donde los domingos se celebra la Noche Gay. Pero son los sábados cuando este antiguo barrio industrial se convierte en el epicentro de la vida nocturna y el ocio con sus conciertos y los bares más cool como Indochine o Bésame Mucho.

'Chill out' al anochecer

Otra apuesta de ocio en la ciudad suiza es caminar por la orilla del río Shil y bañarse en una de las 18 piscinas naturales privadas que existen -si el tiempo lo permite-. En verano muchas de ellas se convierten en auténticos chill out vespertinos como Rimini y locales míticos como Barfussbar o Seebad Enge en los que picar algo acompañados de algún cóctel, cerveza o vino ambientado como los pubs de las playas mediterráneas al caer el sol.

Más información en la Guía de Suiza