11 fotosReactor nuclearAsí es el ‘Académico Lomonósov’, el primer reactor nuclear flotante de RusiaEl diseño y construcción del navío ha durado una década y su periplo comenzó en abril de 2018, cuando salió a remolque de San Petersburgo rumbo a MúrmanskEl País22 ago 2019 - 21:56CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinBlueskyCopiar enlaceSu nombre oficial es 'Académico Lomonósov'. Greenpeace lo llama el “Chernóbil flotante”. Es la primera central nuclear flotante de Rusia, que tiene previsto zarpar este viernes del puerto de Múrmansk, en el noroeste del país, hacia la península de Chukotka, donde comenzará a operar en diciembre. En la imagen, un empleado trabaja en los preparativos del navío antes de que zarpe al mar del Norte.Maxim Shemetov (Reuters)Un viaje de 5.000 kilómetros hasta la punta oriental de la costa ártica rusa que ha disparado las alarmas de los ecologistas, que ven un riesgo innecesario de catástrofe nuclear.Maxim Shemetov (reuters)El diseño y construcción del Académico Lomonósov ha durado una década y su periplo comenzó en abril de 2018, cuando salió a remolque de San Petersburgo rumbo a Múrmansk. En la imagen, un empleado durante los trabajos de puesta en marcha, el 12 de abril de 2019.Lev Fedoseyev (getty)Las autoridades rechazan cualquier comparación con el caso de Chernóbil, la central soviética que sufrió en 1986 el peor accidente nuclear de la historia, y esgrimen la diferente potencia de los reactores nucleares: dos, de 35 MW cada uno, capaces de suministrar energía a una ciudad de unos 100.000 habitantes.Maxim Shemetov (reuters)Greenpeace y otros grupos ambientalistas insisten, en cambio, en la amenaza que supone la instalación, que precisa ser remolcada, lo que hace más fácil que sea objetivo de un atentado terrorista. El 'Académico Lomonósov' necesitará dentro de siete años un recambio del combustible nuclear, para lo que deberá ser remolcado nuevamente a Múrmansk, con el consiguiente gasto y amenaza de contaminación. En la imagen, un empleado trabaja durante los preparativos para el viaje.Maxim Shemetov (reuters)El navío tiene 140 metros de largo y 30 de alto y permite albergar a 342 personas, 80 de forma permanente y el resto en turnos rotatorios de mes y medio. Cuenta también con un gimnasio, una piscina y un bar, en el que no se sirve alcohol.Maxim Shemetov (reuters)Este tipo de ingenios nunca se ha producido masivamente. Será, de hecho, la primera planta nuclear flotante desde el MH-1A Sturgis, el reactor militar estadounidense que proveyó de electricidad al canal de Panamá entre 1968 y 1975, cuando se consideró que su mantenimiento era excesivamente caro. En la imagen, un empleado observa el interior de la maquinaria del navío.Maxim Shemetov (REUTERS)Uno de los elementos de fondo del proyecto es el energético. Pevek, la ciudad portuaria en la península de Chukotka donde atracará el ingenio, recurre al carbón (traído desde las minas del distrito Zyrianka, en Yakutia) y a la antigua planta nuclear de Bilíbino para producir electricidad.Lev Fedoseyev (GEtty)El 'Académico Lomonósov', argumentan las autoridades, contribuirá precisamente a reducir las emisiones contaminantes —al frenar la quema de carbón— y a cerrar la obsoleta planta nuclear.Lev Fedoseyev (getty)Pevek tiene menos de 6.000 habitantes, pero necesita la energía para la industria minera de la zona, especialmente los yacimientos de oro. En la imagen, dos operarios colocan el escudo de Rusia en el 'Académico Lomonósov'.Lev Fedoseyev (getty)Vista general del 'Académico Lomonósov', el pasado junio en el puerto de Múrmansk.Lev Fedoseyev (getty)