Un aficionado crea una obra de arte
El temible Tony Miles cae ante el casi desconocido Cordes, quien lo ataca en dos oleadas de sacrificios
¿Puede un aficionado batir a una estrella de primera fila mundial en una partida de alta competición (no en una exhibición de simultáneas)? Sí, y es más frecuente que en tenis, por ejemplo, porque algunas competiciones de ajedrez (las que se disputan por el sistema suizo) mezclan a profesionales y aficionados, que generalmente se enfrentan en las primeras rondas. Ahora bien, es mucho más raro que el aficionado victorioso firme una obra maestra, para la que se supone que no está capacitado. Y eso es lo que hace el alemán Hans-Hoerg Cordes en la asombrosa partida de este vídeo. Todo indica que, con su jugada 18, Miles ha logrado parar el ataque frenético de su rival, pero este se inventa entonces otra oleada igual de peligrosa, que el británico no acierta a frenar de la mejor manera, y es arrasado. En cuanto al talento de Cordes, una pista significativa: también ganó a Gari Kaspárov, ese mismo año, pero en simultáneas.
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