David Bisbal y Elena Tablada, enfrentados por la privacidad de su hija
El cantante reprocha a su expareja que difunda imágenes de la pequeña en las redes y la diseñadora asegura, sin embargo, que "la cuida y la protege"
La guerra abierta entre David Bisbal y su expareja, la diseñadora Elena Tablada, que tiene como protagonista a la hija que tienen en común, Ella, de nueve años, parece no tener fin. Aunque el cantante almeriense ha intentado mantenerse al margen de los ataques que Tablada ha vertido contra él desde hace unos meses, Bisbal se ha visto obligado a hablar en público sobre la situación. “Cuando la madre de mi hija va a la televisión a hablar de este tipo de cosas no lo debería hacer. Yo previamente he tratado de convencerla para que proteja la intimidad de su hija, que no lo ha hecho nunca. Yo no he dicho jamás que ni la madre ni la familia de mi hija pueda poner fotos de la niña. Lo único que quiero es que protejan la intimidad de una menor. […] Que no hable de ella, que no la asocie a marcas… punto”, volvió a insistir el artista la pasada semana, durante la gala de los premios Dial, en Tenerife.
Unas declaraciones que no han dejado indiferente a Tablada, quien no ha dudado en responder al padre de su hija a través del programa de Telecinco Socialité, donde con sus palabras insinuó que Bisbal nunca antes se había preocupado de su hija. “Lo bueno es que Ella sabe quién la ha criado, quién la ha cuidado y quién la ha protegido. Hay que tener clase y saber respetar a la madre de su hija”, zanjó Tablada.
La disputa entre Bisbal y Tablada comenzó el pasado noviembre, cuando la diseñadora de origen cubano revelaba en la revista ¡Hola! la mala relación que mantiene con el padre de su hija desde que terminaron su noviazgo hace ya casi ocho años, en verano de 2011. “El David de ahora es para mí un completo desconocido”, comentaba Tablada a la publicación, donde buscaba “dejar atrás los fantasmas” que la persiguen desde entonces. "Cuando descubrí que estaba embarazada, no sabía cómo decírselo a David. Su reacción, y la de su entorno, no me gustó. Llevábamos seis años, y aun así mi embarazo fue supersolitario. […]Pensé que, por fin, mi pareja me daría mi lugar... pero no. He nadado siempre a contracorriente", revelaba la diseñadora de 38 años.
Unos meses antes de esta entrevista, Tablada se había enzarzado en otra discusión con la actual esposa de Bisbal, Rosanna Zanetti. La diseñadora recriminó a la modelo y actriz venezolana que publicara una imagen en sus redes sociales en la que aparecía junto a la hija de Bisbal y Tablada, vestidas ambas de flamencas en la feria de Almería. "Le pedí a Rosanna que no subiera fotos con Ella porque crea polémica y no quiero problemas" contó Tablada en el programa Viva la vida y especificó que, desde ese momento, su relación con el cantante cambió y se volvió “insostenible”, según dijo.
Una petición por parte de la diseñadora que resulta un tanto incoherente, ya que ella es la primera que sí publica imágenes con su hija, y siempre con la cara de la menor al descubierto. Algo que no parece gustar al artista almeriense, pues es precisamente lo que le exige a la madre de su hija, y por lo que la demandó el pasado febrero.
De esta batalla tampoco se ha librado Philip Llopis, el chófer de David Bisbal, a quien Elena Tablada denunció a principios de año por hacer declaraciones sobre el tiempo que el cantante y la diseñadora compartieron como pareja. El empleado del cantante afirmó que Tablada trataba a Bisbal “como a un perro” y que cuando él no estaba “organizaba fiestas de hasta tres días con amigos”. También llegó a decir que Elena Tablada le había sido infiel al cantante durante el tiempo que fueron pareja.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.