2018 está siendo un año marcado por los fenómenos meteorológicos extremos. Las sequías sin precedentes han afectado a gran parte del mundo. Según datos de la ONU, en 2025 1.800 millones de personas sufrirán la escasez del agua, un problema que trae consigo la desertificación y degradación de suelos, afectando especialmente a los países en vías de desarrollo al provocar un déficit en la producción de alimentos. Un repaso fotográfico de las zonas más afectadas por la sequía en lo que llevamos de año
El norte de Europa también es víctima de las sequías en este 2018. La ola de calor y las escasas precipitaciones han provocado incendios en el Círculo Polar Ártico. En julio de este año, Suecia se ha visto obligada a solicitar ayuda internacional por una oleada de fuegos. En la foto, los bomberos usan helicópteros para atacar las llamas en un bosque en Korskrogen, cerca de Ljusdal (Suecia), el 25 de julio de 2018.JONATHAN NACKSTRAND (AFP / Getty Images)En Nueva Gales del Sur, la escasez de precipitaciones desde 2010 está provocando una grave sequía que ya afecta a la práctica totalidad del territorio (98%). Algo que está teniendo graves consecuencias para el sector agrícola y ganadero (calidad del suelo fertil, enceracimiento de costes de alimentación...). Los peces luchan por sobrevivir y los animales migran a otros núcleos. En la foto, un árbol solitario cerca de un abrevadero en un prado cercado por la sequía en las propiedades de Jimmie y May McKeown, ubicadas en las afueras de la ciudad de Walgett, en Nueva Gales del Sur (Australia), el 20 de julio de 2018.David Gray (REUTERS)California ha sido otra de las grandes afectadas por los incendios durante todo el año. A finales de julio, en el norte comenzó el denominado incendio 'Mendocino Complex', un fuego que se propagó durante 11 días con un total de 114.800 hectáreas abrasadas por las llamas, siendo este el peor incendio de su historia. La gran cantidad de árboles muertos por la sequía y los escarabajos de corteza han permitido que los incendios forestales se propaguen rápidamente. En la foto, árboles muertos se alinean en un claro cuando un helicóptero que lucha contra el fuego Ferguson pasa por detrás en el Bosque Nacional Stanislaus, California, el 22 de julio de 2018.NOAH BERGER (Getty Images)En el Sahel -Burkina Faso, Chad, Malí, Mauritania, Níger y Senegal- las hambrunas provocadas por las crísis hídricas son una constante. En la foto, una imagen aérea del paisaje árido del desierto del Sahel y los patrones de asentamiento del pueblo del norte de Burkina Faso y Malí (África Occidental).Robert_Ford (Getty Images/iStockphoto)La guerra no es la única causa de desplazamientos. La sequía que azota a los campos de cultivos también provocan el éxodo rural en un país en el que gran parte del PIB proviene de su agricultura. Además, el éxodo hacia las ciudades que dio comienzo en 2007 por la fuerte escasez de agua en las regiones rurales, es señalado frecuentemente como una de las cuasas que impulsó el conflicto. En la foto, un hombre observa un campo afectado por la sequía en la región de Palmira.Kristen Elsby (Getty Images)Sudán del Sur es uno de los países que más sufren los fenómenos extremos, afectado por las sequías y las inundaciones. El conflicto civil que asola al país más joven del mundo y la fuerte sequía de este 2018 dejan a su población en un estado de vulnerabilidad frente a las hambrunas. En la foto, dunas de arena cerca de Meroe, en el Desierto de Nubia, una de las zonas más áridas del país.Torsten Antoniewski (Getty Images/imageBROKER RF)En Afganistán, la sequía pone en riesgo la seguridad alimentaria de dos millones de personas. Una vista general,muestra el agua restante en algunas partes del humedal Hamoon, cerca de la ciudad de Zabol, en la provincia sureste de Sistan-Baluchistan, fronteriza con Afganistán.BEHROUZ MEHRI (AFP/Getty Images)En Sudáfrica la sequía ha obligado a declarar el estado de "desastre nacional". En febrero, las autoridades de Ciudad del Cabo fijaron un plan de emergencia denominado 'Día Cero', por el cual habría que limitar de forma extrema el acceso al agua si las medidas de emergencia -que ya suponen restricciones de suministro- no funcionasen. En la foto, un banco seco de una presa casi vacía en una granja en Piket Bo-berg, Piketberg, al norte de Ciudad del Cabo, el 7 de marzo de 2018, como resultado de una sequía de tres años.WIKUS DE WET (AFP/Getty Images)El corredor seco de América Latina, que abarca desde el sur de México hasta Panamá, sufre desde 2009 una situación crítica debido a la escasez de agua provocada por un cambio en el régimen de precipitaciones, afectando al rendimiento de los cultivos. Guatemala, Honduras, Nicaragua y El Salvador son los paises más vulnerables de la zona. En la foto, el hondureño Santos Rodríguez, de 70 años, atraviesa un campo de maíz afectado por la sequía en San Buenaventura, a 30 kilómetros al sur de Tegucigalpa, el 15 de agosto de 2018.ORLANDO SIERRA (AFP/Getty Images)El norte de África y Oriente Próximo es una de las zonas más afectadas historicamente por las sequías. En Marruecos, la agricultura supone 15% del PIB y el 23% de las exportaciones. En Egipto, el 55% de la gente vive de cultivar alimentos. En la foto, el desierto del Sahara (Marruecos).danm (Getty Images)Senegal atraviesa su tercera crisis hídrica en seis años y se enfrenta a un grave problema de hambruna, dejando a 245.000 personas sin alimento. En la foto, animales muertos por la sequía en Senegal.LYS ARANGO/ACCIÓN CONTRA EL HAMBRE (EUROPA PRESS)En España, el problema de la sequía se está convirtiendo en una constante, siendo una de las regiones más áridas de Europa. Afecta especialmente a la cuenca mediterranea, que ha registrado un incremento de las sequías en las últimas cinco décadas, siendo la región de Murcia una de las más damnificadas. En las Islas Canarias, Lanzarote y Fuerteventura son las zonas de mayor aridez. En octubre de 2017, por primera vez en la historia, Galicia , la 'Espeña verde', activó la alerta por sequía debido a una caída en el régimen de precipitaciones del 65% respecto a la media de pluviosidad de la región. Los trasvases, una médida de caracter extraordinario para mítigar problemas constantes de sequía, se están convirtiendo en una herramienta recurrente de la gestión hídrica. Fotografia tomada en Salcedón, Guadalajara, donde una docena de aldeas se vieron obligadas a utilizar buques tanque para garantizar el suministro de agua a sus ciudadanos durante el verano pasado.Manu Reino/SOPA Images/LightRocket (Getty Images)
