El vídeo de una embarazada que pone la zancadilla a un niño y que se ha visto 67 millones de veces
La mujer ha sido condenada a 10 días de prisión, aunque no irá a la cárcel por su gestación. El niño sufrió una lesión leve en la cabeza
Muchas veces los niños pueden ser molestos, no paran, juegan o gritan. A veces nos agobiamos cuando nos molestan cenando, queremos que sus padres les manden callar, pero luego intentamos respirar hondo y comprender que son niños. Un episodio sucedido en un restaurante en China ha revolucionado las redes y ha abierto un debate sobre la actitud de una embarazada que pone la zancadilla a un niño.
El hecho, ocurrido en la ciudad china de Baoji, provincia de Shaanxi, comienza cuando los padres del menor, de cuatro años, que además son dueños del restaurante, le pidieron a su hijo que fuera a buscar palillos chinos. El pequeño entra corriendo en el establecimiento sin fijarse en lo que hay a su alrededor, sin saber que acaba de golpear en la cara a una mujer que está embarazada de siete meses con una tira de plástico que protegía la puerta. Tras unos segundos, el niño sale del establecimiento, pero antes, la mujer le pone la zancadilla y el menor cae al suelo, haciéndose daño en la cabeza. La madre del pequeño verificó los hechos gracias a las cámaras de vigilancia del local.
Tras el incidente, la embarazada pidió disculpas, se entregó a la policía y propuso encargarse de los gastos médicos. Las autoridades locales la condenaron a 10 días de prisión, aunque no llegará a cumplirse al estar embarazada. Pero tendrá que abonar una multa de 130 euros por lo sucedido.
El vídeo se ha visto más de 67 millones de veces. Las imágenes tomadas por el establecimiento se subieron a las redes sociales de inmediato y se viralizaron con mucha rapidez. Los usuarios de las redes se indignaron por la acción de la joven embarazada acusándola de exagerada y mala persona, A pesar de que hay gente que la comprende, son mayoría los que están en contra de este tipo de actos a "niños inocentes". El ataque personal hacia la mujer ha sido tan obvio que, incluso, la madre del pequeño ha pedido calma: "No queremos afectarla. Yo misma tengo niños. Puedo comprenderlo".
