Comedia gamberra y bruta de autor. Esta podía ser una de las muchas formas de definir el film de los hermanos Farrelly. Esta pareja creativa llevaba ya años moldeando una fórmula que les iba acercando, poco a poco, al éxito con películas como 'Dos tontos muy tontos' o 'Vaya par de idiotas'. Pero en esta ocasión alcanzaron la perfección y reventaron, a la vez, las taquillas de todo el mundo. ¿Su fórmula? Incluir sus habituales gags repletos de incorrección en una trama de comedia romántica clásica. Tan fácil (y tan complicado) como eso.Quizá haya películas de esta edad de oro del terror japonés más notables que esta, pero la de Hideo Nakata tuvo el honor de ser la primera que se exportó mundialmente y, además, conseguió tener un remake americano de lujo. Hay que reconocer que film sigue asustando, a pesar del paso del tiempo, y que esa llamada que reciben las víctimas que ven un vídeo provoca escalofríos veinte años después. Por este motivo merece ser considerada un verdadero clásico del terror y de las historias de fantasmas orientales.Otro debut rotundo e incontestable para esta lista de películas que celebrarán su veinte aniversario en 2018. 'Pi, fe en el caos' es la ópera prima de Darren Aronofsky, una historia sobre matemáticas y también sobre el descenso a los infiernos de la locura, acompañada de una banda sonora inolvidable (y desconcertante) de Clint Mansell. Para los que piensen que 'Mama!' es un película compleja y difícil de interpretar, con 'Pi' tienen un buen examen por delante.El aleman Tom Tykwer consiguió filmar un thriller en el que el tiempo se condensa y en el que la protagonista, a la que hace referencia el título, no para de correr. Una película con un argumento sencillo, con pocos personajes, que basa su gran atractivo en el ejercicio de dirección y en un montaje totalmente adrenalítico. Además, sirvió para descubrir a su protagonista: Franka Potente.Bienvenidos al 'big bang' del universo de Wes Anderson. Con esta película se dio a conocer el director y, de paso, sentó todas las bases de lo que luego sería su cine. El tono melancólico, los personajes desubicados, la elegancia formal y esos colores tan reconocibles se dan cita en esta historia generacional que escribió a cuatro manos con su amigo Owen Wilson. El protagonista, Jason Schwartzman, completa el trío de genios que se esconden tras la creación de este film.Sin duda, la película más mítica estrenada en 1998, la que ha generado más club de fans y el film que se ha ganado por méritos propios el título de film de culto. El Nota es uno de los personajes más influyentes de las últimas décadas, y más carismáticos... Pero es que todo el universo lisérgico que gira a su alrededor es igualmente icónico. Los hermanos Coen firmaron la comedia definitiva de los noventa y Jeff Bridges elevó a Lebowski a la categoría de mito.Guy Ritchie inauguró con esta película el género del 'thriller hooligan' que luego él mismo ha tratado de explotar pero con resultados mucho más discretos, salvo en la magnífica 'Snatch: cerdos y diamantes'. Esta película clásica de robos es, a la vez, una comedia bastante salvaje ambientada en los bajos fondos londinenses. Ritchie estaba inspirado y la película corre a la velocidad de un Fórmula 1 impulsada por éxitos musicales de ayer y de siempre, que suenan en su muy 'british' banda sonora.'Celebración' fue la película encargada de inaugurar el influyente movimiento Dogme 95 y también una de las obras más notables que surgieron de esa revolución ideada por Lars Von Trier y Thomas Vinterberg, director de este film. Una familia de la alta burguesía danesa celebra una reunión. En principio todo es idílico, hasta que uno de los integrantes decide que esa comida es el mejor momento para airear algunos trapos (muy) sucios del patriarca. Un film que deja al espectador clavado, literalmente, a la butaca.Todd Haynes levantó testimonio del nacimiento del glam-rock, que tuvo lugar en Londres en la década de los setenta. Sus protagonistas podrían ser David Bowie o Marc Bolan y la estética, por supuesto, está impregnada de 'glitter' y purpurina. Uno de los últimos grandes musicales, con una banda sonora de lujo auténtico repleta de clásicos, y un reparto encabezado por Jonathan Rhys Meyers, Ewan McGregor y Toni Collette. Imprescindible.Ana y Oto. Oto y Ana. Da igual en qué orden se lean sus nombres. Ellos son los amantes a los que hace referencia el título y con los que el destino se dedica a jugar durante todo el largometraje. Julio Medem plantea un escenarios de casualidades, encuentros y desencuentros con un aliento poético muy particular que, a pesar de ser una apuesta de riesgo, llegó al corazón de los espectadores. Najwa Nimri y Fele Martínez interpretan a la pareja en su edad adulta y con ellos viajamos hasta los límites. En todos los sentidos.Un año antes de que las hermanas Wachowski revolucionaran la ciencia-ficción cotemporánea con 'Matrix', Alex Proyas ya había puesto su granito de arena con 'Dark City'. Igualmente inspirada en referentes literarios clásicos dentro del género y en el mundo del cómic, la película plantea una distopía que parece rodada bajo el influjo estético de los clásicos del cine expresionista alemán de comienzos del siglo XX. Quizá su puesta en escena ha quedado algo anticuada, pero su capacidad para sorprender se mantiene intacta.Con esta película, el sueco Lukas Moodysson se convirtió en el director que se rifaban todos los festivales del mundo cuando trataban de cubrir su cuota de cine indie de calidad. Tras este film, llegarían 'Juntos' y 'Lylia forever' y entonces su carrera comenzó a tomar derivas poco comprensibles. El caso es que 'Fucking Amal' refleja muy bien su estilo cercano al documentalismo y también su habildad a la hora de retratar, de manera sensible pero no condescendiente, a sus personajes. En esta ocasión, dos adolescentes que se enfrentan ante el vértigo de la vida adulta.Su pareja protagonista (Elodie Bouchez y Natacha Régnier) se llevó todos los grandes permios de intepretación del año, incluido el galardón del Festival de Cannes que ambas obtuvieron ex-aequo. Sobre su inolvidable trabajo se sustenta esta historia de dos jóvenes a la deriva, que tratan de encontrar su lugar en el mundo, y que Eric Zonca filma con un aire que recuerda mucho a los títulos más libres de la 'nouvelle vague' francesa. Una de las menos populares de la lista, y, por eso, una de las que se debe reivindicar con más insistencia.En el mismo año que llegaba a los cines 'Celebración', la primera película del Dogma 95, Lars Von Trier aportaba su obra al movimiento que él mismo había impulsado. Si el director danés disfruta provocando, en esta ocasión alcanzó una de las cimas más altas de su carrera. Y eso que tiene películas que resultan verdaderos 'ocho miles' para el espectador no iniciado en su universo. Filmada con cámara en mano y de una forma muy directa, los idiotas a los que hace referencia el título forman un grupo que trata de acabar con el sistema desde dentro.Casi todos los directores de esta lista estaban dando sus primeros pasos en 1998. Sin embargo, Terrence Malick ya llevaba tres décadas en el mundo del cine, tiempo en el que solo había estrenado dos películas. Desde 'Días de gloria' (1978) no se tenían noticias del cineasta y por eso, cuando se estrenó este film sobre la II Guerra Mundial, el acontecimiento cinematográfico fue mayúsculo. El film es un poético alegato antibelicista, con un reparto que incluye a todas las grandes estrellas de Hollywood del momento. Aunque alguna de ellas (como Adrien Brody) vieron minimizado su papel en la sala de montaje y aun se acuerdan de esto.
