Los enmascarados PYLAR quieren llevar el heavy metal a otro nivel
Publican ‘A ella te conduce la sagrada espyral’, sus textos se inspiran en Alan Moore, HP Lovecraft o Herman Melville y su música es perfecta para rituales paganos
Detrás de PYLAR hay varios misterios. El primero, el que se esconde tras las máscaras. ¿Quiénes son los miembros de este grupo? Se intuyen que vienen de la órbita de bandas Orthodox y Blooming Látigo. “Pero es una información que no hemos podido contrastar ni confirmar”. Eso da algunas pistas sobre su sonido, que es el siguiente misterio. Se les relaciona con el doom o el kraut rock. Pero a ellos lo que le inspira y les mueve en esta vida es “llevar el heavy-metal a otro nivel”.
Citan en las letras de sus canciones textos de Mircea Eliade, Herman Melville, Alan Moore, Julian Cope o a su “admiradísimo Howard Phillips Lovecraft”. Sus discos suenan como oraciones a dioses paganos y sus conciertos son rituales en los que el público puede llegar a entrar en trance. Hablamos con dos de ellos, Lengua de Carpa y Bar-Gal, porque publican nuevo trabajo: "A ella te conduce la sagrada espyral" (Humo). Un título que también es un misterio.
¿Por qué vais siempre con la cara tapada con máscaras y esas ropas tan especiales?
Bar-Gal: En PYLAR el yo queda atrás. Al colocarte tras una máscara, tras un personaje con otro nombre, eres capaz de realizar actos vedados para tu personalidad común. La máscara te da la posibilidad de transformarte en lo que sea, incluso en dios. Esta práctica es muy antigua y nos facilita la tarea con respecto a lo que queremos transmitir.
A ella te conduce la sagrada espyral. Pero, ¿quién es ella y qué es la sagrada espyral?
Bar-Gal: Ella ha sido nombrada de muchas maneras a lo largo de la historia: es la Diosa Madre, la de múltiples rostros, la Triple Diosa... y más tarde, cuando el patriarcado se impuso, su nombre real era temido por el poder que albergaba y se la comenzó a llamar Tiamat, Ishtar, Maya, Astarté, Afrodita, o nuestro preferido: Lucifer. Es la virgen negra que aún puedes contemplar sin muchas dificultades en algunos templos.
La espiral es uno de los símbolos más antiguos de la humanidad, que encierra prácticamente el secreto de la existencia y la evolución del universo. Designa las fuerzas cósmicas en movimiento y la relación entre el ser humano (microcosmos) y la existencia (macrocosmos). Desde la prehistoria, la espiral ha sido representada y adorada. Su poder es inimaginable para el ser humano moderno. Nosotros aportamos nuestra visión en el disco.
Doom experimental, kraut, doom metal son etiquetas, pero cómo definiriaís vuestro sonido esquivando estos lugares comunes.
Lengua de Carpa: No vamos a definir nuestro sonido, es algo que no nos toca hacer a nosotros.
Bar-Gal: Ya que preguntas, te diría que en mi cabeza sonamos como si Greg Ginn de Black Flag hiciera una versión de Manowar ralentizada hasta el extremo de sonar como el Jerusalem de Sleep; como si Ligeti invirtiera pasajes micropolifónicos de su Requiem como una base sobre la que improvisaran los Amon Düül II del Phallus Dei; como si Coltrane usara su saxofón para lanzar infinitos 'loops' llenos de un 'reverb' demencial con Nico entonando fuera de sí arcanos mantras matriarcales leídos de la piedra más profunda de un templo megalítico, mientras un Rob Halford hasta arriba de opiáceos le hace los coros.
Vuestra música tiene algo de celebración pagana, ¿a quién adoráis?
Lengua de Carpa: Más que adorar lo que hacemos es celebrar cada vez que conseguimos curvar el tiempo lineal. Nuestro fin último es hacer presente a todos la circularidad del tiempo y liberar al que se acerque a nuestra propuesta de la prisión del tiempo lineal.
Uno os imagina celebrando una especie de ceremonia secreta antes de poneros a tocar, ¿lo hacéis?
Lengua de Carpa: Obviamente si celebrásemos ceremonias secretas ni sacaríamos discos ni actuaríamos delante de todo el que quiera venir a vernos, lo haríamos todo en secreto. Es fácil comprobar que no es así.
Hablan de vuestros conciertos como un ritual colectivo, ¿preparáis de alguna manera al público?
Bar-Gal: Sí, usamos una introducción musical cuyo objetivo es permitir al público alejarse de la estimulación constante a la que estamos sometidos y que intenten situarse en un plano más receptivo. Solemos usar canto gregoriano o polifonía medieval, una música muy poderosa capaz de detener el tiempo.
Lengua de Carpa: El público elige hasta qué punto quiere involucrase en nuestra propuesta, nosotros no tenemos intención de obligar ni convencer de nada. Si decides involucrarte de pleno dejarás de ser público y pasarás a ser protagonista de tu propio proceso.
El sonido de PYLAR es exigente a veces, y otras veces duro de digerir, pero al final todo acaba encajando, ¿os gusta poner a prueba a vuestro público?
"Casi nadie medita hoy en día, no dejamos descansar nuestra mente. Cuando te cruzas con ello, en este caso a través de PYLAR, es muy probable que lo agradezcas. Así que no creo que nuestra música sea exigente sino terapéutica"
Bar-Gal: Nuestro público, al menos a los que hemos podido conocer mínimamente, son personas acostumbradas a enfrentarse a propuestas musicales no convencionales. Pero también ocurre al contrario. Personas ajenas totalmente a este tipo de música nos han dicho que conectan con ella a un nivel muy profundo. El uso adecuado de la repetición, de los mantras y de las notas pedales hacen que tu mente se sitúe automáticamente en un estado que suele ser bienvenido muchas veces. Casi nadie medita hoy en día, no dejamos descansar nuestra mente. Cuando te cruzas con ello, en este caso a través de PYLAR, es muy probable que lo agradezcas. Así que no creo que nuestra música sea exigente sino terapéutica.
Lengua de Carpa: Además, no hacemos esto pensando en un público abstracto del cual no podemos conocer nada. Hacemos esto porque es la manera de curvar el tiempo. Si resulta que hay público pues bien, y si no también bien. El caso es que creativamente no puedes pensar en un público para hacer lo que hacemos.
Venís de otros grupos (Orthodox y Blooming Látigo) y formáis un colectivo.
Bar-Gal: Es un honor para nosotros estar relacionados con esas bandas y músicos ya que su visión musical coincide con la nuestra. Su música nos inspira y nos motiva. De esas bandas obtuvimos la experiencia necesaria que necesitábamos para que un proyecto tan ambicioso como PYLAR saliera adelante. Es increíble estar rodeados de músicos que aman el heavy metal de una manera tan profunda y que, como nosotros, quieren llevarlo a otro nivel.
Llegastéis a editar un casette (113 copias) con dos canciones de 26 minutos, ¿reivindicáis este soporte?
Lengua de Carpa: Si de verdad nuestra propuesta sonora te hace trascender, lo último en lo que vas a pensar va a ser en el soporte. El casette era el formato ideal para esa grabación, La Gran Obra (Knockturne Records), ya que presentábamos una composición y su reverso especular, por lo que nos hacían falta dos caras. El formato digital no nos permitía esto.
Y, en cuanto a la duración de vuestras canciones... ¿nunca os habéis planteado un trallazo rápido y seco?
Lengua de Carpa: Nuestro segundo disco, He venydo a reclamar my trono (Knockturne Records), es un trallazo rápido y seco de 46 minutos de duración. Teniendo en cuenta que narramos una historia que necesita un ceremonial de tres días y dos noches para ser contada, hicimos un ejercicio de síntesis del cual estamos muy orgullosos.
Venir de Sevilla y plantear paisajes sonoros tan densos y profundos, tan centroeuropeos, es darle una buena vuelta al tópico, ¿no?
Lengua de Carpa: No acabo de entender lo de los sonidos centroeuropeos. Nuestra música tiene mucho de las culturas atlánticas y mediterraneas que confluyen en la tradición musical del Bajo Valle del Guadalquivir. Es música densa y profunda. No vas a encontrar elementos centreuropeos como la polka u otros estilos similares.
Bar-Gal: Precisamente PYLAR se concibió para crear música que reivindicara la poderosísima herencia que posee el sur y que muchos no suelen apreciar. Hemos cantado a la Triple Diosa que habitó el sur de la Península hace milenios y que aún sigue haciéndolo. Hemos compuesto canciones basándonos en la geometría sagrada de los templos megalíticos de Andalucía. También nos ha inspirado el riquísimo sincretismo del que es fruto nuestra región con esa mezcla infinita de saberes que nos ciega por su luminosidad. Y, evidentemente, la opresión a la que hemos sido sometidos históricamente en el sur nos ha inspirado para reivindicar nuestro folclore y nuestra herencia, aquella que solo los que han caminado por la oscuridad del tiempo pueden poseer.
Habladnos sobre los textos, ¿de dónde los sacáis?
Lengua de Carpa: No los sacamos de ningún sitio, están allí para todos. Aunque la mayoría de las veces no utilizamos textos. En los dos últimos discos solo hemos utilizado textos en una sola canción.
Bar-Gal: Bueno, hemos robado muchas ideas de la prisca sapientia, el lenguaje de los pájaros, Marija Gimbutas, La Tabla Esmeralda de Hermes Trismegisto, Marius Schneider, los arcanos escondidos en el lenguaje protoneolítico, Mircea Eliade, Herman Melville, las letras de Heavy Metal, Alan Moore, Julian Cope, nuestro admiradísimo Howard Phillips Lovecraft y el demencialmente brillante Oswald Spengler (alabado sea tres veces).
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