El presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, consuela a un hombre mientras llora, durante una visita a los municipios del centro del país afectados por los incendios forestales de la semana pasada, en Santa Comba, Vouzela (Portugal).NUNO ANDRE FERREIRA (EFE)El presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, besa a una mujer mientras llora, durante una visita a los municipios del centro del país afectados por los incendios forestales de la semana pasada, en Santa Comba, Vouzela (Portugal).NUNO ANDRE FERREIRA (EFE)El presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, visita el parque industrial Oliveira de Frades calcinado, durante una visita a los municipios del centro del país afectados por los incendios forestales de la semana pasada, en Santa Comba, Vouzela (Portugal).NUNO ANDRE FERREIRA (EFE)El presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, abraza a una mujer mientras llora, durante una visita a los municipios del centro del país afectados por los incendios forestales de la semana pasada, en Santa Comba, Vouzela (Portugal).NUNO ANDRE FERREIRA (EFE)El presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, visita el parque industrial Oliveira de Frades calcinado, durante una visita a los municipios del centro del país afectados por los incendios forestales de la semana pasada, en Santa Comba, Vouzela (Portugal).NUNO ANDRE FERREIRA (EFE)El presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, besa a una mujer mientras llora, durante una visita a los municipios del centro del país afectados por los incendios forestales de la semana pasada, en Santa Comba, Vouzela (Portugal).NUNO ANDRE FERREIRA (EFE)