Estrenamos el nuevo single del dúo 'synth-pop' Cor Blanc
La banda barcelonesa actúa en Barcelona y Madrid en el marco de Primavera Club. Muy ochentas y muy Au Revoir Simone
En Barcelona existe un pequeño sello -podríamos llamarlo boutique- que lleva desde su creación en 2014 dando nuevos aires al pop. Hablamos de Luup Records, que ya el año pasado se apuntó un par de sonadas tantos, las revelaciones PAVVLA (más en clave folk) y Museless (en una órbita sintética y protagonista de nuestro reportaje sobre las mujeres de la electrónica en este país). Desde hace unos meses se intuye que a esta lista habrá que sumar al dúo Cor Blanc.
Sergi Serra Mir y Mireia Bernat, ambos de Barcelona, forman este proyecto que, como suele ocurrir en estos casos, surge y crece al calor de plataformas como Bandcamp, desde donde han ido dando salida a una ristra de lanzamientos como Res Acaba, editado por el sello japonés Element Perspective, o Pròleg en Fred, disponible en casete. En sus canciones podemos encontrar influencias que van del folk a la indietronica y, de ahí, al dream-pop, siempre desde un enfoque lo-fi.
Esto cambió a raíz de su fichaje por Luup Records el pasado verano. El apoyo por parte de la discográfica catalana se ha traducido en un sonido más limpio y decididamente synth-pop, huyendo de los orígenes en baja fidelidad. Canciones como el primer avance, Alice, se acercan a esos terrenos cándidos y melosos que exploraron ávidamente Au Revoir Simone la pasada década.
Ahora Tentaciones tiene la oportunidad de estrenar su nuevo single, Inharmonics, que les muestra recular de ese sonido vivaracho de Alice en favor de un aura más taciturna e introspectiva. Un nuevo adelanto de un esperado disco de debut que debería llegar en los próximos meses y que anticipa su inminente actuación en Primavera Club (Madrid, 20 de octubre; Barcelona, 21 de octubre).
¿Cómo se conocen Sergi y Mireia?
Somos Sergi y Mireia, dos amigos de Barcelona. Nos conocimos gracias a una amiga en común, hace unos 10 años, y fue la música la que nos fue acercando. Coincidíamos en conciertos y festivales, y de forma natural nació la amistad, sin darnos cuenta del proceso. De golpe nos vivimos yendo a Oporto a ver un concierto de CocoRosie. Más adelante nos dimos cuenta que cada uno estaba haciendo su música, Sergi más con sintetizadores, rollo cósmico, y Mireia más con guitarra tipo cantautor. Y probamos de juntarnos a ver qué ocurría, y aquí estamos. Nos lo pasamos muy bien.
Mireia: Yo creo que teníamos que conocernos y hacer música. Me gusta pensar que somos almas gemelas musicales.
¿Qué es un corazón blanco? De algún modo me transmite mucho lo que es vuestra música. Mucha emoción y ternura.
¡Es verdad! Qué bonito, gracias. Es una imagen muy tierna y poética. Realmente el nombre no fue escogido por nuestro sonido (porque tampoco sabíamos cuál era, y seguimos sin saberlo), sino más bien por el sonido de las palabras y la belleza en su escritura.
Un corazón blanco puede ser inocencia, pureza, belleza. El corazón de un ángel. Pero no nos fijamos tanto en los significados que pueda haber detrás. Es bonito que las cosas no estén definidas y puedan evocar libremente. Aun así, el rollo naive creo que sí que encaja con nosotros.
¿Escogéis Luup Records porque compartís una misma sensibilidad pop?
Todo fue gracias a Balcony TV Barcelona y, por ende, gracias a Raül Chamorro de Ultra Local Records, que fue quien les habló de nosotros y tuvimos esa gran oportunidad. Grabamos el tema Alice y ahí fue donde Luup Records nos vio y contactó con nosotros, cosa que nos flipó mucho, porque hasta el momento no nos habíamos ni planteado el hecho de que un sello pudiera estar interesado en lo que hacíamos. Fue alucinante. Una emoción difícil de describir. Las personas que hay detrás del sello son muy bonitas, una familia que transmite cercanía y naturalidad. Nos sentimos queridos, así que, ¿quién no escogería eso?
¿De qué manera os ayuda tener el respaldo de un sello?
Nos ayuda de muchas maneras, podemos grabar nuestras canciones en un estudio, de forma profesional, y con un súper productor (Aleix Iglesias) que además conecta con nuestra forma de crear. Es genial poder jugar a hacer música. Jugar sin prisas. Tenemos una súper mánager (Meri) que curra mucho para movernos y lo consigue: Hay una mini gira por Italia que anunciaremos pronto.
Contadnos sobre el proceso de creación -de principio a fin- de esta canción que estrenamos.
Ninguno desarrolla un rol fijo ni concreto. Nos dejamos llevar por el momento, jugamos mucho a improvisar. De hecho, no sabríamos deciros cómo fue el proceso con Inharmonics. No es algo a lo que prestemos mucha atención, salió y nosotros la cogimos. La letra salió improvisada en ese momento, jugando con la melodía, y puede que por eso sea así de sencilla y potente. Igual si te pones a escribir sentado y pensando en ello es fácil que lo que salga sea más complejo y dé más vueltas al tema. Ahora que lo pensamos, ¡creo que el día que salió la canción fue el día que nos reunimos con Luup Records por primera vez.
¿De qué hablan vuestras canciones? ¿Dónde sacáis la inspiración, tanto lírica como musical?
Buena pregunta. Las letras no son muy pensadas, no hay mucho tiempo detrás de ellas. Eso no significa que no le demos importancia, ¡al contrario! Pero dejamos que salgan mucho a través de las melodías. Como lo que os comentábamos con “Inharmonics”, a veces sale una letra entera jugando, cantando sin pensar. Una letra que no hubiera salido si nos hubiéramos sentado con un lápiz y un papel. Es bonito dejarse ir, lo que sale tiende a ser directo y natural, sin florituras. Nos gusta. También es una forma de escribir, hacerlo sin escribir: cantando con la melodía. Creo que hay mucha fantasía en nuestras letras, con ingredientes de nuestras experiencias, por supuesto, pero sin querer contar algo en concreto, lo que quiera ser contado es lo que saldrá.
Musicalmente no sabríamos decir lo que nos inspira, quizá los sonidos en sí. No tenemos un sonido prefijado al que queramos llegar con cada canción, más bien los sonidos que vamos probando y nos gustan en ese momento son los que van creando la canción. Creo que todo nuestro proceso es muy natural, no hay muchas palabras ni pensamiento detrás. Dejamos que fluya, y siempre llegamos a un punto en el que los dos coincidimos y nos gusta lo que oímos.
¿Los vídeos que hemos podido ver en YouTube pueden ser una pista de cómo será vuestro directo?
Depende de qué vídeos hayáis visto, porque hay algunos muy divertidos que no se podrían considerar pista de nada. Pero si hablamos de los vídeos en que se nos ve en una mesa con esculturas y detalles encima, sí. Realmente el directo llegó a ser así porque es como ensayamos en nuestro taller, se nos haría raro tocar sin vernos. Aunque ahora estamos estudiando un set más ligero para cuando salgamos fuera, ¡a ver qué sale!
¿Cómo lleváis el disco de debut? ¿El hecho de que trabajéis con el apoyo de un sello y que sea en formato largo os permitirá probar cosas que no os atrevíais a hacer?
Uf, tenemos muchísimas ganas de que salga ya, aunque todavía queremos grabar más canciones, y así poder hacer una buena selección. El sonido será diferente a lo que se puede oír ahora en Spotify, por ejemplo. Se nos hace raro vernos en lo que habíamos hecho antes.
El hecho de grabar en un estudio y con un productor te permite probar muchas cosas nuevas, al menos en nuestro caso, porque hasta el momento grabábamos de forma muy lo-fi y tampoco teníamos mucho conocimiento sobre producción. Ahora podemos jugar muchísimo más. No sé si se nota, pero somos un poco como dos niños pequeños jugando.
¿Algún grupo del Primavera Club que ya conocieseis previamente y que queráis recomendar? ¿Y alguno que hayáis descubierto en las últimas semanas?
Ganges, que también son familia Luup Records, ojalá pudiéramos verlos, pero tocan el día que tocamos nosotros en Barcelona. A los dos nos ha flipado mucho Yellow Days, un chico muy joven. Lo que hace es bestial: La voz, las letras, la música... Tenemos muchas ganas de verlo, como a Smerz.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.