Te guste o no, lo intuyeses o no, la música pop es cada vez más repetitiva. Y el ejemplo perfecto es Rihanna. Es la gran estrella de la última década, con más números uno de Billboard que nadie (nueve) y más semanas en lo más alto de la clasificación desde 2010. Y, como demuestra el trabajo de Collin Morris, que gracias a un algoritmo analiza y representa gráficamente las letras de más de 15.000 canciones desde 1958 hasta hoy, es la artista que más reiteraciones hace en sus canciones en 60 años de historia del pop, un 65% de sus letras son repeticiones (“Work, work, work, work, work, work…”). Morris visualiza el crecimiento de las redundancias en las composiciones del Top 100 de Billboard y concluye también que los títulos que han figurado año tras año entre las 10 canciones más exitosas son todavía más repetitivos de media. En su visualización, publicada en The Pudding, podemos buscar además entre más de 100 artistas para comprobar qué temas son más o menos variados en sus letras. Michael Jackson, por ejemplo, tiene a Beat It entre las más repetitivas y a Thriller entre las menos.