Calvin Harris se arrepiente de su escandalosa separación de Taylor Swift

Hasta junio de 2016 Calvin Harris no conocía el escándalo. Todo eran aplausos, éxitos, fortuna. Ocupaba el puesto número uno de la lista de Electronic Cash Kings de Forbes, superaba por el doble los ingresos de su rival David Guetta, logró eclipsar al todopoderoso Jay-Z. Y por si fuera poco, además formaba junto a Taylor Swift la pareja mejor pagada de la industria de la música. Pero todo lo que sube, tiene que caer, así lo dicta la ley de gravedad. Y él cayó. El 3 de junio de 2016 su rostro y el de la cantante aparecían en todas las revistas del corazón y los portales de cotilleos. Sus nombres eran trending topic, el motivo: tras 15 meses de un idílico romance terminaban su relación de “forma amistosa”.

Al principio parecía que si bien el amor no había perdurado, la amistad sí. "La única verdad aquí es que la relación llegó a su final, pero lo que queda es una gran cantidad de amor y respeto", escribió el autor del hit número 1 de Billboard How Deep Is Your Love. Pero un mes después la “amistad” se terminaba y daba comienzo una batalla que incluyó tuits y canciones y en la que se involucraron famosos posicionándose con uno u otro. Un año después, el dj ha vuelto hablar de la separación y esta vez asegura arrepentirse de haber convertido aquella ruptura en un circo.

“Fue un impulso completamente equivocado”, reconoce en una entrevista con la edición británica de la revista GQ. Se refiere concretamente a este tuit: “Me imagino que si eres feliz con tu nueva relación, deberías enfocarte en eso en vez de ensañarte con tu ex". El polémico mensaje ocurrió después de que la cantante estadounidense, que en ese entonces era pareja del actor Tom Hiddleston, lo acusara de no respetar su autoría en el tema This Is What You Came For, que el dj lanzó con Rihanna.

"Estaba protegiendo lo que creo que es mi único talento y que en ese momento estaba siendo menospreciado. Sentía como si todo se hubiera puesto en mi contra y por eso estallé”, reconoce a la publicación. “Fue muy difícil lidiar con todo lo que pasaba. Yo consideraba que eso pertenecía a mi vida personal y de pronto se había hecho público. Fue mucho más publicitada la ruptura que la relación. Cuando estábamos juntos fuimos muy cuidadosos de que no se convirtiera en un circo. En ese sentido ella siempre respetó mis sentimientos. No llevo nada bien el ser una celebridad. Pero cuando terminamos, todo se convirtió en un infierno”, confiesa.

El británico reconoce que ahora ve todo el escándalo y sus mensajes en Twitter como el resultado de haber caído ante la presión mediática. “Me tomó un tiempo darme cuenta de que nada de eso realmente importa. Yo soy un tipo positivo. Para los dos fue una situación incómoda. Claramente no era correcto lo que estaba pasando”, añade. Parece que con esta entrevista y un año después de tantos dimes y diretes, esta vez Harris ha firmado, por fin, la paz con Swift.