Los bancos de leche materna que se van creando en los hospitales se nutren del altruismo de madres que dan el pecho a sus hijos y al mismo tiempo donan a otros bebés que han nacido prematuros o con complicaciones y han de permanecer largo tiempo ingresados. Los expertos aseguran que su recuperación es visiblemente más rápida con leche materna que con leche de fórmula para lactantes.