La celebración que cruza el Atlántico
El festival Charco, que tuvo lugar el pasado fin de semana, festejó la relación musical entre Latinoamérica y España de la mano de Larios, que cumple 150 años
Hay un océano entre ambos, pero hay mucho más en común. Latinoamérica y España comparten mucho de cultura, tradiciones y ganas de celebrar la vida. Todo eso se hizo visible el pasado fin de semana en la nueva edición del Festival Charco, que se celebró dentro del marco de las Noches del Botánico, el gran ciclo de conciertos del verano en Madrid, que reunió a artistas de ambos lados del Atlántico que, entre muchas otras cosas, comparten un espíritu que llega desde un poco más allá: desde el Mediterráneo.
Desde esa cultura y tradición también llega Larios, la ginebra mediterránea por excelencia, que cumple 150 años y, por tanto, representa mejor que ninguna otra bebida esa manera de entender y de celebrar la vida. Como patrocinador oficial de Las Noches del Botánico, Larios se unió también a la fiesta en la que participaron artistas que compartían una misma esencia de energía cálida y ganas de celebrar la vida.
La nueva edición del festival Charco arrancó el sábado 16 con la presencia de dos de las mayores bandas llegadas de América Latina. Los mexicanos Molotov, una formación mítica del rock en su país que en los 2000 llegaron a ser tremendamente populares en España. Junto a ellos, llegaron los colombianos Bomba Estéreo, expertos en fusionar ritmos populares como la cumbia o la champeta con elementos electrónicos y de baile. Del otro lado, la noche contó con el rock instrumental y enérgico de Toundra, una de las mejores formaciones en directo que se puedan encontrar en la actualidad, y el rock de garaje de los madrileños Los Nastys.
La del sábado 17 fue otra noche de unión de sonoridades y culturas separadas por kilómetros pero con mucho en común. Como por ejemplo, la del uruguayo Jorge Drexler, desde hace muchos años residente en España, y una de las personalidades que mejor resumen el espíritu de unión del festival. Pero también la de la argentina Juana Molina, experta en reunir experimentación y música popular. De igual forma, el chileno Chico Trujillo, actualizó los sonidos de la cumbia de su país con ska o reggae. De esta parte, llegaron el cancionero profundamente inspirado en Latinoamérica de Xoel López y el rock de autor de Tulsa.
Todos ellos consiguieron que el festival Charco se viviese con un espíritu mediterráneo y de celebración, creando el ambiente ideal, ala caída del sol, para disfrutar del sabor de Larios. Habrá que esperar para la siguiente edición del festival, pero las Noches del Botánico continúan durante este mes, con los directos de artistas como Mariza (21 de julio), Seal (22), Mariza (23) o Gloria Gaynor (29). Y Larios seguirá allí presente, para celebrar su 150 aniversario en el mejor lugar posible.
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