Legalización del transfuguismo
Hubo una época en la que estaba mal visto presentarse a unas elecciones por un partido y luego votar a otro una vez adquirida el acta. Pero ahora estamos en el tiempo de la nueva política y los partidos viejos hacen cosas que nunca habían hecho. Al menos, cosas que aunque se hubieran hecho, se criticaban y responsabilizaba de ellos a los diputados díscolos por encima de las órdenes de partido. Ahora se ha puesto de moda prestar diputados a otros partidos para que puedan formar grupo parlamentario, para que estén presentes en la Mesa del Senado o del Congreso o para elevar a los altares a un presidente independentista que pretende romper amarras con el orden constitucional. Lo que antes era transfuguismo ahora es altura de miras política. Los partidos han dado luz verde a los tránsfugas y han legalizado el transfuguismo, y así ya no tienen que preocuparse por explicarlo. Los tránsfugas que en el pasado hacían la puñeta a los partidos ahora son los que ponen cara a los acuerdos de necesidades. Ay, si Tamayo y Sáez pudieran vivir estos tiempos de bonanza, seguro que con su sapiencia serían unos de los más valorados.— Mario Varela Gestoso.