9 fotos24 horas en una caravana de mujeresLa tradición de los autocares de solteras resiste 30 años después del primeroJaime VillanuevaNatalia JunqueraMérida - 28 oct 2015 - 12:40CETWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceSábado, 17 de octubre, 9 de la mañana. Las participantes en la caravana de mujeres salen de Madrid rumbo a Mérida. Tienen entre 25 y 70 años. La mayoría son latinoamericanas, pero también hay varias pandillas de amigas españolas.Jaime VillanuevaBea y Miriam, ambas colombianas, charlan en el autobús camino a Mérida. Son veteranas. Llevan cinco años participando en caravanas de mujeres. "Por 20 euros me llevan, me dan comida, cena, baile... ¿y si encima ligo? ¿Qué mas se puede pedir?", dice Miriam.Jaime Villanueva10.30. Miriam, colombiana, anima el viaje al ritmo del reguetón que pone José, el conductor. Al fondo, Isabel, española, que ha enredado a otras seis amigas para participar en esta caravana de mujeres.Jaime Villanueva"Les habla el comandante del vuelo, quedan 18 minutos para aterrizar. Váyanse peinando", anuncia José, el conductor del autobús, por el micrófono. Las mujeres desenfundan polveras y barras de labios minutos antes de llegar al hotel Romero, a las afueras de Mérida, donde esperan los hombres.Jaime VillanuevaUn hombre se acerca a hablar con un grupo de participantes en la caravana de mujeres en el Hotel Romero, a las afueras de Mérida. El recibimiento ha sido algo descorazonador para ellas: hay cinco hombres y 50 mujeres. Aunque luego vendrán más.Jaime VillanuevaJulio, de Calamonte, corteja a Lupita. Se conocieron en la anterior caravana de mujeres, el pasado abril, y desde entonces chatean por teléfono. Él dice estar muy enamorado y le pide matrimonio. Ella dice que sin anillo, nada de nada.Jaime Villanueva18.00 El cortejo de Julio y Lupita, sus enfados y reconciliaciones, entretienen a otras seis mujeres de la caravana, que registran todo en sus teléfonos móviles.Jaime VillanuevaLa pandilla de españolas hace tiempo en el Hotel Romero mientras espera a que empiece el baile. Isabel, primera por la derecha, ha animado a muchas amigas a venir. Son como una cadena. La mayoría de participantes en la caravana se ha enterado de su existencia por alguna conocida.Jaime Villanueva02:30 de la madrugada. Después de la cena han llegado más hombres al hotel Romero para asistir al baile, pero el ratio sigue en contra de las participantes en la caravana de mujeres. Queda solo una hora para conocer a alguien interesante e intercambiar teléfonos. A las 3.30, el autobús sale de vuelta a Madrid.Jaime Villanueva