Varoufakis: y ahora, ¿qué?

Yanis #Varoufakis : star 2.0 >> http://t.co/V0z6IXbdX5 pic.twitter.com/jHFcS4Yk5W — Jean Zeid (@JeanZeid) julio 6, 2015

1. Cobrador del frac

Puede que sea difícil imaginarlo, pero quizás Yanis quisiese pasarse al otro lado, probar a ver las cosas desde el otro extremo de la mesa. ¿Y si en vez de ser el endeudado fuese el prestamista? Su dureza mental y su mirada lacerante podrían ser suficientes para cobrar cualquier deuda, para convencer al gorrón más avezado de aflojar la viruta. Y todos sabemos que el frac le sentaría de maravilla.

2. Portero del Berghain

Puede que solo haya una persona que infunda más respeto en toda Europa que Yanis: Sven Marquard, ese cancerbero que abre (y sobre todo cierra) las puertas del club berlinés Berghain a aquellos que hacen cola durante horas para intentar acceder a los placeres que ocultan sus paredes. Si el bueno de Sven decidiese algún día abandonar la noche y dedicarse por completo a su otra pasión además de destrozar las noches de la gente, la fotografía, Varoufakis bien podría ocupar su lugar. Su mirada imponente y su físico intimidante serían suficientes para disuadir a los clubbers más persistentes. Y, además, podría seguir diciendo “oxi” siempre que quisiese.

3. Modelo de Calvin Klein

Quizás la firma de calzoncillos por excelencia esté pensando en otros sectores de mercado, a juzgar por su campaña con Justin Bieber, pero si en algún momento decidiesen dirigirse al público maduro, ahí Yanis no tendría competencia. Su cuerpo de estatua griega sería el reclamo perfecto para todos aquellos hombres que buscan un modelo, no solo ya físico, sino de carácter.

4. Doble de riesgo

Los meses al frente del ministerio de finanzas griego le han otorgado a Varoufakis una destreza importante a la hora de asumir riesgos y enfrentarse a situaciones extremas, de las que siempre ha salido con la cabeza alta. No es tan descabellado, entonces, imaginar a Yanis asumiendo esas escenas que ningún actor quiere interpretar: una caída por un puente en una moto en llamas, una pelea a muerte colgado de unas lianas o un cameo en una película de Garci. Como John McClane, pero de verdad.

5. Jugador de poker profesional

Que sepamos, nadie ha podido sostener la mirada a Yanis durante más de unos pocos segundos. Eso y su carácter estoico y persistente le convierten en un candidato ideal a jugador de poker profesional, capaz de jugar una misma partida durante horas o días. ¿Quién puede saber si se está tirando un farol con solo mirarle al rostro? Si la Troika no pudo, sus adversarios tampoco.

6. Entrenador personal de Íñigo Errejón

Porque, seamos sinceros: la política funciona como la vida, nos guste o no. Y el paso de ideólogo nacional a gurú global no es posible sin unos buenos abdominales y un gesto digno de Rottweiler sin bozal.

7. Consejero matrimonial

Le sobrarían las palabras. Basta con que reagrupe y clasifique cronológicamente todas las fotos que la prensa rosa le ha sacado (a escondidas o no) junto a su pareja, la artista Danae Stratou. Como esta, en la que se sube a la moto junto a ella segundos después de dimitir, se colocan los cascos, y esquivan a los cientos de periodistas para partir raudos hacia su destino: una terraza de barrio en la que les espera una cerveza fría.

8. Actor secundario en 'Sons of Anarchy'

La pandilla chungo-motera que protagoniza esta serie necesita un ideólogo que le dé un poco de densidad teórica a la tribu y, sobre todo, un gestor que sepa poner la facturas (y a los usureros) en su sitio.