Los Abramovich reúnen a ricos y famosos en Moscú
Dasha Zhukova, esposa del multimillonario, convoca a Leonardo DiCaprio, Harvey Weinstein, Miuccia Prada y Stella McCartney y hasta Woody Allen en la reapertura del Garage Museum of Contemporary Art
Para los ricos y famosos del planeta la cita de esta semana era en Moscú. Y Dasha Zhukova, esposa del multimillonario Roman Abramovich, propietario del equipo Chelsea, se ha encargado de que actores como Leonardo DiCaprio, artistas como el superventas Jeff Koons, productores como Harvey Weinstein, diseñadoras como Miuccia Prada y Stella McCartney hasta directores de cine poco adictos a los flashes como Woody Allen acudieran esta semana a la capital rusa a la reapertura del Garage Museum of Contemporary Art que ella misma dirige. Se trataba de la nueva puesta de largo del primer museo privado ruso, inaugurado en 2008 sin excesivo ruido pero que siete años más tarde ha sido sometido a un lavado de cara firmado por el arquitecto estrella Rem Kolhaas en el Gorky Park de Moscú, donde un antiguo restaurante soviético abandonado durante dos décadas ha sido reconvertido en un espectacular espacio para el arte de 5400 metros cuadrados.
Los esfuerzos de Zhukovapara atraer a la inauguración a los nombres de éxito del planeta demuestran que la escena artística se ha convertido en uno de los ingredientes básicos con los que hoy se aliña la vida de las celebridades. Mientras que en los tiempos de la Factory de Andy Warhol en los años sesenta y setenta el mundo del arte no dejaba de ser un universo pequeño e incluso marginal, hoy que el arte se ha convertido en un bien precioso que sirve para que los millonarios conserven y multipliquen sus millones sin los riesgos que entraña la bolsa, dejarse ver entre arte y artistas sin duda está de moda. “Me encanta el espíritu creativo de los artistas. Me gusta escuchar sus historias, verles trabajar. Me interesa su manera de ver el mundo e ir a visitar sus estudios, siempre revueltos. No hay nada divertido en el orden ¿no?” declaró Zhukova en The Wall Street Journal en 2011, cuando anunció que también proyectaba invertir 400 millones de euros en una isla de las artes en San Petersburgo, algo todavía hoy en ciernes.
La antigua sede del Garage Museum no era lo suficientemente llamativa y a Zhukova, como a su marido siempre les ha gustado presumir. Ahora que ha colocado su juguete en una de las áreas más populares de Moscú tiene los titulares garantizados por algo que va más allá del mero dejarse ver junto a su marido.
A sus 34 años, el recorrido de Zhukova hasta llegar al arte contemporáneo ha estado precedido por su interés por la moda y el periodismo. Hija de una científica y un rico empresario petrolero, nació en Moscú pero su mudó a Estados Unidos cuando tenía diez años. Se licenció en lenguas eslavas y literatura pero antes de ejercer ninguna profesión se enamoró de Roman Abramovich y se casó con él en secreto en 2007. Desde entonces ha sido diseñadora de la firma de moda Kova & T, después ha dirigido la revista POP y finalmente se ha inclinado por el negocio del arte contemporáneo. Comenzó buscando con avidez asesores para hacer crecer la colección de su marido –en 2008 pagaron 87 millones de dólares por Tríptico de Francis Bacon- y después dio el salto como empresaria creando una web de venta de arte junto a Larry Gagosian, aunque no duró mucho. Hoy, además de dirigir el Museo Garage también dirige una revista de arte con el mismo nombre. Vive a caballo entre Moscú, Londres y Los Angeles. Y es madre de dos hijos con Abramovich, un detalle importante en la vida de un matrimonio con residencia oficial en la capital británica, donde divorciarse de un oligarca se paga mejor que en ningún otro sitio.
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