Más de lo mismo
Después del 9-N, cuando parecía que el ruido de los nacionalistas catalanes se había suavizado y nos llegaban más fuertes los ecos —nunca apagados— de otros asuntos más familiares, como el paro, la crisis, los casos de corrupción, el peligro islamista, etcétera, ahora vuelve Artur Mas y nos amenaza hasta el 27-S con el “España nos roba, nos coloniza, nos avasalla…”. Como Cicerón a Catilina, millones de españoles podríamos preguntar al presidente de la Generalitat: ¿hasta cuándo abusará usted de nuestra paciencia? ¿En qué momento va a priorizar las más prosaicas tareas del Gobierno de la Comunidad sobre el cansino ronroneo independentista? ¿Acaso eso de gobernar es cosa de subalternos y usted cree que está llamado a conseguir otras metas más trascendentes? ¿Forman parte de ese sueño multitudes de agradecidos ciudadanos, rindiendo tributo a la memoria de un idolatrado padre de la patria? ¿Es usted el prototipo de líder altruista que lo da todo en beneficio de su comunidad o el aventurero imprudente que no mide los costes con tal de sostenerla y no enmendarla? Estoy seguro de que nos esperan meses de emociones contradictorias.— Antonio López López.
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