Jiang Siqi es una adicta al iPad, pero sus padres aprovechan la coyuntura para que utilice la tableta como instrumento de aprendizaje. El juego de la fotografía, por ejemplo, le ayuda a familiarizarse con el alfabeto latino.ZIGOR ALDAMALa familia al completo: el padre, la madre y las dos hermanas.ZIGOR ALDAMAHu Yen muestra la cartilla del seguimiento médico del embarazo, el parto, y el crecimiento de Jiang Siqi. Y otra con las vacunas que ha recibido la pequeña.ZIGOR ALDAMADebido al trabajo del padre y de la madre, Jiang pasa la mayor parte del tiempo con la niñera. Por la tarde siempre sale a jugar en el pequeño parque de la urbanización en la que viven, donde interactúa con otros niños que también están con sus niñeras.ZIGOR ALDAMADebido a la alergia a la leche materna, Jiang se ha alimentado siempre con leche el polvo. Después de varios escándalos, la madre no se fía y la compra por Internet importada de Europa.ZIGOR ALDAMACuando vuelve de la calle, a Jiang le permiten jugar o ver alguna de sus películas favoritas en el iPad.ZIGOR ALDAMALos padres están preocupados por la seguridad de Jiang, así que pisa poco la calle para jugar. Los raptos y los accidentes son demasiado frecuentes, razón por la que Jiang sólo puede disfrutar de un par de horas al día a la intemperie.ZIGOR ALDAMALa niñera Peng Fengxiang regresa con Jiang en brazos al piso en el que vive con la familia. Cada vez es más habitual entre la población de clase media contar con una persona que ayude en las tareas del hogar y cuide de los hijos las 24 horas al día.ZIGOR ALDAMADe izquierda a derecha, el padre, la madre con Jiang, y un amigo de la familia almuerzan juntos el domingo en el comedor del piso. Es uno de los pocos momentos en los que están todos juntos.ZIGOR ALDAMALa pequeña Jiang trata de animar a su hermana mayor, que ha sido castigada a limpiar el suelo en el que ha tirado comida.ZIGOR ALDAMAAntes de ir a la cama, hacia las 20:30, toca baño. Al principio Jiang lo odiaba, pero con el tiempo ha aprendido a disfrutarlo.ZIGOR ALDAMA
