11 fotosPaparazi en el bosqueLograr imágenes que nos inviten a disfrutar mirándolas es uno de los objetivos de la fotografía de alta velocidad. 03 dic 2013 - 14:58CETWhatsappFacebookTwitterLinkedinBlueskyCopiar enlaceCernícalo primilla ('Falco naumanni'). Retratar una especie en peligro de extinción con angular para mostrarla en su entorno requiere de una gran dosis de paciencia y observación.Alberto SobrinoCarbonero común ('Parus major'). Parar el movimiento en el momento justo requiere muchas tomas fallidas.Alberto SobrinoCorzo ('Capreolus capreolus'). Aparentemente parece disecado, pero nada más lejos de la realidad, se trata de un corzo vivito y coleando de Alcalá de Henares.Alberto SobrinoCorzo ('Capreolus capreolus'). Toma de alta velocidad realizada a ras de suelo con un objetivo angular para proporcionar un ángulo de visión diferente.Alberto SobrinoGineta ('Genetta genetta'). Combinar la alta velocidad, la iluminación artificial y la larga exposición con la luz natural es posible. Aquí tenemos una muestra en una sola toma.Alberto SobrinoLechuza ('Tyto alba') en una bodega madrileña.Alberto SobrinoMochuelo común ('Athene noctua'). Una foto lleva muchas horas de trabajo: hay que buscar el animal en la naturaleza, conocer sus costumbres y realizar una fotografía cómo y dónde uno quiere.Mochuelo común ('Athene noctua'). Fotografía realizada con pre-encuadre y barrera 'fast shutter' disparada a distancia por radiofrecuencia, otra técnica muy empleada por los fotógrafos de naturaleza.Alberto SobrinoMurciélago de cueva ('Miniopterus schreibersii'). En la fotografía de alta velocidad se buscan instantes que el ojo no ve.Alberto SobrinoMurciélago pequeño de herradura ('Rhinolophus hipposideros'). Una fotografía realizada en la salida de una cueva con cuatro flases y barrera de infrarrojos. La velocidad de este mamífero dificulta la toma.Alberto SobrinoPetirrojo ('Eritachus rubecula'). Fotografía realizada con barrera de infrarrojos y seis flases con diferentes escalas de potencia y filtros de color para ambientar el escenario.Alberto Sobrino