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El médico de Michael Jackson ya es un hombre libre

Conrad Murray sale de prisión dos años antes de cumplir su condena por buen comportamiento Seguirá sin poder ejercer la medicina tras ser declarado culpable de la muerte del cantante

Conrad Murray, en una imagen del juicio por la muerte de Michael Jackson, en 2011.
Conrad Murray, en una imagen del juicio por la muerte de Michael Jackson, en 2011.IRFAN KHAN / POOL (EFE)

Conrad Murray, el doctor convicto por el homicidio involuntario de Michael Jackson, ya está en libertad. El médico que le administró esa última dosis de propofol que acabó con la vida del cantante el 25 de junio de 2009 salió de la cárcel central de hombres de California a primera hora del lunes evitando ser visto ya sea por las cámaras de televisión o por los fans de Jackson, congregados a la puerta del recinto.

Murray, de 60 años, cumplió así dos años de los cuatro a los que había sido condenado. Una reducción que, como aclaró su abogada, Valerie Wass, “no fue ni un minuto antes” de lo que le correspondía, acortada la condena por buen comportamiento y por lo llenas que están las cárceles en California. El portavoz de la prisión, Steve Whitmore, también descartó la posibilidad de cualquier trato especial. Como recordó a la prensa, Murray fue tratado como el resto de la población penitenciaria aunque no dio más detalles sobre su puesta en libertad más allá de confirmar que la hora y el método fue escogido para “asegurar su seguridad”.

No se sabe quién era el “representante” que esperó a Murray a su salida. Su abogada tan solo indicó que el médico se fue directamente a ver a su familia, aunque no precisó a quién se refería, teniendo en cuenta que este divorciado en dos ocasiones tiene siete hijos de seis mujeres diferentes. Conrad logró evadir este primer enfrentamiento con los seguidores de Jackson que acudieron a este centro de máxima seguridad vistiendo camisetas con eslóganes como Thriller Killer y exigiendo que el doctor personal del fallecido rey del pop admita responsabilidad por sus actos de negligencia.

Sin embargo, como indicó la abogada en un enfrentamiento verbal con estos mismos seguidores, este no será el último incidente que Conrad tendrá que evadir, aunque pidió respeto para su cliente. Wass también confirmó que el facultativo sigue adelante con la apelación de su condena, así como con esa otra lucha por recuperar su licencia médica, que le fue retirada al ser declarado culpable de la muerte del cantante.

Conrad está en libertad, pero su futuro no parece muy prometedor. El médico se declaró indigente de forma legal hace un par de años y sus licencias médicas fueron revocadas tanto en Texas, el primer estado en hacerlo tan solo dos meses después de la muerte del cantante, como en California, Nevada y Hawái, lugares donde este cardiólogo tuvo oficinas. Aún así Wass está “muy esperanzada” de que conseguirá que su cliente vuelva a practicar la medicina demostrando su inocencia en un caso que, según la apelación, nunca tuvo las pruebas necesarias para condenarlo.

A nivel físico, nadie confirmó la salud de este hombretón que con anterioridad había declarado mediante su abogada que su estado había empeorado notablemente desde su condena el 7 de noviembre de 2011. Murray cumplió condena en una cárcel de máxima seguridad en California para protegerlo del resto de la población penitenciaria con un acceso muy restringido a los lugares de recreo, hasta que fue trasladado a una celda más grande para evitar los dolores de cabeza y la atrofia que aseguró padecía como consecuencia de su paso por la cárcel.

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