_
_
_
_

Merkel y Hitler

Tomàs Delclós

El autor del artículo ha publicado una nota en su blog en la que, sin entrar a valorar la decisión del diario, lamenta que se interprete que la tesis de ese artículo es comparar a la Señora Merkel con Hitler, tal y como algunas personas están dando a entender en la red. Lo lamento porque creo que es evidente que de ninguna manera son personas comparables o que sus políticas sean igual de dañinas. Y, sobre todo, porque creo que de ninguna manera se puede deducir esto último de mi texto. Es más, creo que interpretarlo así solo sirve para desviar la atención sobre el fondo de mi artículo que es claramente otro. Es cierto que en el artículo afirmo que en mi opinión Alemania ha declarado la guerra económica contra el resto de Europa y que eso lo comparo con la búsqueda del espacio vital que llevó a que Hitler desatase la guerra, pero creo que esto debe entenderse como la comparación de dos hechos históricos lamentables aunque de desigual factura, y no como la equiparación de dos líderes políticos. El autor lamenta igualmente que haya que hacer este tipo de comparaciones que involucran a un pueblo al que admiro y finalmente lamenta los problemas que estas interpretaciones hayan ocasionado al diario y a sus lectores y lectoras, y que éstos no puedan seguir leyéndolo en la web.

 En la red ha habido opiniones de todo tipo sobre lo sucedido. De crítica por el contenido del mismo (la comparación, subrayan, no es admisible porque olvida que Hitler asesinó a millones de personas en los campos de exterminio) o por su retirada por parte del diario (compartan o no el contenido del artículo).

 No es tarea del Defensor ni polemizar sobre el contenido de un artículo de opinión, ni sobre la decisión de publicarlo o no. En este caso, sin embargo, al tratarse de la retirada de uno ya publicado y que ello se deba, como afirma la explicación del diario, por afirmaciones inapropiadas, dejo constancia, en beneficio de la transparencia y de la mediación entre los lectores y el diario, de algunas de las cartas de lectores recibidas que, al margen de su opinión sobre el fondo, reprochan la forma en que se ha administrado el error de supervisión, reconocido por el diario. Varios medios extranjeros han calificado la retirada del artículo como una retractación del diario.

Guillermo Ferrer escribe: Quizá la frase más "llamativa" y que supongo que ha sido la desencadenante sea la de "Merkel, como Hitler ha declarado al guerra a Europa para garantizarse el espacio económico vital". No me gustan en absoluto las comparaciones demagógicas y facilonas con Hitler. Pero en este caso, tiene sentido. Tienen sentido porque ambos son dirigentes alemanes y el autor trata de comparar una invasión de un tipo (militar), con otra de otro (económico). Creo que si en vez de con Hitler, hubiese hecho la comparación con Bismark tendría la misma validez. (…). No estoy de acuerdo del todo con el fondo, pero en las formas, si bien pueden ser algo exaltadas, no me parecen ni de lejos suficiente como para eliminarlo de la web una vez publicado. Es evidente que EL PAÍS tiene derecho a publicar lo que crea conveniente, y a llevar una línea editorial propia. Pero lo que me parece poco serio, es publicar un artículo de ese calibre, donde es evidente la que se viene encima, y después retirarlo. Si no quieren ustedes publicarlo, no lo hagan. (…)  Pero una vez publicado, como mucho aclaren ustedes que las opiniones son del autor y no necesariamente las suyas, y apechuguen con las consecuencias .

Pedro José Paúl Escolano, por su parte, manifiesta su desacuerdo con la retirada del artículo. Estando de acuerdo en que la comparación de Merkel con Hitler es exagerada, no creo que sea motivo suficiente para censurarlo; quizás, bastaría con haberle pedido que matizara dicha comparación y mantener el fondo del artículo, en el que se dan explicaciones seguramente certeras del porqué de la posición de la canciller en la no-solución de la crisis económica. Pero lo más grave es la preocupación que me suscita que su diario actúe de esa manera, es decir, censurando de raíz a uno de sus colaboradores habituales.

Juan Carlos Campoy manifiesta que no sé si me escandaliza más la falta de control con lo que se publica o la censura de la libertad de expresión.

Se da la circunstancia de que la comparación de la política de Merkel con el régimen criminal de Hitler, que no se destaca en la versión impresa, fue colocada en la edición digital como sumario del artículo (Merkel, como Hitler, ha declarado la guerra al resto de Europa, ahora para garantizarse su espacio vital económico).

Un lector en un foro del propio diario, donde se comenta la retirada del artículo, considerando totalmente improcedente la comparación que en él figura, subraya que en esos mismos foros se han publicado comentarios que insultan a personas o colectivos tratándoles de nazis, sin que, con desigual diligencia, la moderación de los mismos los haya advertido y retirado en todas las ocasiones que hubiera debido.

Comentarios

Bueno, si pueden censurarse diariamente comentarios en los foros de El País que no incurren ni en insultos ni en teorías aberrantes, no me extraña lo que ha ocurrido con este artículo. Es una lástima comprobar que la censura es el pan de cada día en el diario que ha sido un referente informativo y conformador de opinión. Digo "ha sido".
Esta misma semana el polémico (y brillantísimo) articulista Jakob Augstein publica en Der Spiegel una columna que prácticamente abunda en los mismos argumentos, citando hábilmente a David Graeber y a Jean-Claude Juncker para recordarnos los peligros que acechan cuando se practican operaciones político-económicas del calado de las que estamos viviendo. Las formas podrán ser complicadas, pero el fondo es una opinión perfectamente defendible, con la que podremos estar de acuerdo o no, pero que ahí está. (Por cierto, el Sr. Augstein está envuelto en una agria polémica con Israel por criticar su política, que al final también tiene que ver con esto)Artículo en inglés: http://www.spiegel.de/international/europe/opinion-german-euro-leadership-stubborn-and-egotistical-a-890848.htmlArtículo en alemán: http://www.spiegel.de/politik/ausland/augstein-zur-deutschen-zypern-taktik-starrsinn-machthunger-egoismus-a-890707.html
Perdón, ¿pero acaso no es cierto q Bismarck, el Kaiser Guillermo II, Hitler y ahora Merkel han declarado la guerra a Europa?. ¿No es literalmente cierto?.
Santiago: ¿literalmente Merkel ha declarado la guerra a Europa? Te has dejado Arminio, Carlomagno...¿Cómo se puede declarar la guerra a una entidad no jurídica?
Perdone mi afición a las metáforas. ¿Es acaso el Paramento europeo el q dicta las normas?. ¿O es la burda presión de Merkel?. colocar a Port, Irl y Grecia en la desesperación (y en el caso griego causar el surgimiento de un partido nazi); ¿De dónde la agitación social en España?. e recuerdo q antes de estalar la crisis, España tenía superavit de 1%.Berusconi, un déficit de apenas el 2,5%; pero el Deutsche y el bundesbank salieron a vender como ocos bonos itaianos para impulsar la "sospenzione dela democrazia"!!!. Resultado: Beppe Grillo.Y respecto del asalto a Chipre, le recuerdo q la mismísima comuna de París no confiscó los dineros del Banco de Francia sino q lo hizo a título de préstamo.Han roto la confianza, los griegos desconfiarán de los bancos, nosotros y finamente los propios alemanes.¿Y el SPD se queja de q Merkel "mantiene a Europa?

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_