Grañén, un pueblo entregado a la euforia
Además del 'Gordo', la administración del pueblo también ha entregado este año cuatro millones de euros de la Bonoloto
El pequeño pueblo Grañén, una localidad agrícola situada en medio de los Monegros, vive hoy uno de los días más importantes de su historia. El sorteo de Navidad ha llevado aquí el Gordo, premio que ha quedado muy repartido entre sus 2.000 habitantes y los de localidades vecinas. "He sentido algo indescriptible cuando he oído el número. He reído, he llorado... ¡No lo podía creer!", ha explicado, con un hilo de voz, María del Pilar Arzaga, la dueña de la administración de lotería del pueblo, que tiene 26 años de historia. Para más alegría, Arzaga ha repartido también este año cuatro millones de euros en la Bonoloto. Y más casualidades: hace 50 años, la familia de su marido, de nombre Fortunato, ganó otro premio 'Gordo'.
"Este es un pueblo de albañiles y gente del campo. Muchos han invertido mucho dinero en regadíos y este premio ayudará a tanta gente...", ha seguido Arzaga. "La verdad es que ha tocado a todo el mundo. Jubilados, obreros, amas de casa...".
"Mi jefe me ha dado permiso"
Oscar A. es uno de los agraciados. Albañil de profesión, el premio le ha sorprendido en el tajo. "Mi jefe me ha dado permiso para venir", exclamaba emocionado en las calles de Grañén. "Yo llevo un décimo y eso es mucho dinero, aunque por ahora no pienso dejar el trabajo", ha ido explicando, con aire improvisado. "Este premio me da más seguridad, ahora ya viviré sin miedo de lo que me pueda pasar con el trabajo. Pero de momento seguiré trabajando, luego ya veremos...".
La felicidad del Gordo se ha extendido por la planicie de los Monegros más allá de Grañén. La Asociación de Amas de Casa de la localidad de Sodeto, a unos pocos kilómetros, también ha repartido buena parte del premio, que también ha llegado hasta la capital de la provincia, Huesca. Algunas de las participaciones han sido vendidas en tres bares de la ciudad, uno de ellos el bar Esperanza.
El número 58.268 ha salido agraciado a las 09.57 horas y ha sido cantado por los niños María José Posligua y Johan Fernández. Se trata del Gordo más alto de la historia, con una dotación que este año ha crecido hasta los cuatro millones por serie, lo que eleva el premio por décimo a 400.000 euros. El número ha salido en la segunda tabla y ha sido el segundo premio del día después de un primer cuarto.
"Compré el décimo ayer a última hora"
La suerte se ha aliado especialmente con Mihail y Aurelia, una pareja de inmigrantes rumanos que vive desde hace seis años en Grañén. "Compré el décimo anoche a última hora, cuando la administración estaba a punto de cerrar", ha explicado él. "A mí hasta me supo mal gastarme 20 euros en la lotería. Nunca jugamos y pensaba que era imposible que nos tocara", ha añadido la mujer. Mihail trabaja en un desguace. Ella está desempleada. La pareja no ha parado de recibir felicitaciones de los vecinos en toda la mañana. "Es muy emocionante", exclaman. "Por ahora solo queremos disfrutar del momento, luego ya veremos".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.