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Rubalcaba, trasladado a la UCI para controlar su fiebre

Los médicos tomaron la decisión para "su mejor control".- El último parte difundido por el Ejecutivo, de ayer por la tarde, asegura que la salud del ministro no reviste gravedad

El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, continúa en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Gregorio Marañón, donde fue ingresado el pasado fin de semana para tratarse de una infección de orina. Según el último parte médico difundido en la tarde de ayer por el Ejecutivo, su situación es "estable".

Rubalcaba fue ingresado el pasado domingo en este centro médico "por un cuadro febril secundario a infección urinaria", según informó ayer la Vicepresidencia del Gobierno, en el parte médico firmado por los doctores Carlos Hernández Fernández, jefe de Servicio de Urología del hospital, Luis Audibert Mena, jefe de Departamento de Medicina Interna, y José Eugenio Guerrero Sanz, jefe de Servicio de Medicina Intensiva. Según el comunicado, los facultativos decidieron, "ante la persistencia de fiebre", su traslado a la UCI "para su mejor control". Antes de este traslado, Rubalcaba se encontraba en una habitación de planta del citado centro hospitalario. Ayer por la mañana, Pérez Rubalcaba canceló la agenda de comparececias y actos que tenía previsto para esta semana con el fin de recuperarse.

El domingo, el número dos del Gobierno se desplazó al hospital porque tenía fiebre muy alta que, en un principio, pensó que podría atribuirse a un catarro. No obstante, los médicos le diagnosticaron una infección de orina que, según las mismas fuentes, pudo ser consecuencia de una prueba que le fue practicada el pasado jueves: una biopsia de la próstata que descartó un posible proceso cancerígeno. Rubalcaba tenía previsto participar el mismo día del ingreso en un acto del PSOE en Elche, pero no pudo asistir por encontrarse ya indispuesto.

En el inicio del acto, la ministra de Sanidad, Leire Pajín, hizo referencia a la ausencia de Rubalcaba. "Le hubiese gustado estar aquí físicamente, pero, desgraciadamente, la gripe en estos tiempos hace estragos", aseguró.

En la agenda oficial no constaba ningún acto público del vicepresidente y ministro del Interior previsto para el lunes. Hoy martes tenía que comparecer en la Comisión de Interior del Congreso para dar explicaciones sobre las tasas de criminalidad. El miércoles tenía que volver a responder en el pleno del Congreso al diputado del PP Ignacio Gil Lázaro sobre el llamado caso Faisán y a la portavoz, Soraya Saénz de Santamaría, sobre economía.

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, le llamó ayer por teléfono al vicepresidente para transmitirle su apoyo. Rubalcaba también ha recibido el respaldo de Gil Lázaro, que deseó al ministro "sinceramente y sin ningún retintín un pronto restablecimiento".

La situación médica del vicepresidente se convirtió ayer en uno de los principales temas de conversación entre los usuarios de la red social Twitter. Su apellido, Rubalcaba, se elevó hasta el segundo puesto de los temas más tratados, desbancando como tema de conversación a los 110 kilómetros por hora, nuevo límite máximo de velocidad.

Alfredo Pérez Rubalcaba, durante la rueda de prensa de un Consejo de Ministros.
Alfredo Pérez Rubalcaba, durante la rueda de prensa de un Consejo de Ministros.AP

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