Mujeres...ni en la mesa ni en la cocina
Obama almorzó recientemente con 12 apóstoles de la tecnología, investigación y educación de EE UU. En el extremo derecho, Carol Bartz, la 13ª, jefa de Yahoo!. La mujer de la izquierda está como "esposa de".
Sólo hay una mujer entre las 150 empresas más grandes de Silicon Valley. Se llama Carol Bartz. Dirige Yahoo desde hace dos años, captada tras el tsunami que sufrió la compañía (Su fundador no quiso venderla a Microsoft). Cuando tratan de elogiar a Bartz como “una de las mujeres más importantes de las empresas tecnológicas” suele puntualizar: “una de las personas”. Su activismo en favor de la mujer le llevó hace muchos años a sufragar la enseñanza de las matemáticas a las niñas. Han pasado décadas desde aquello y Bartz se siente entre decepcionado y escéptica. “Me hubiera gustado que mis hijas lo tuvieran más fácil, pero se ha avanzado muy poco en estas décadas”. En una reciente entrevista a EL PAÍS lo expresó de forma muy gráfica: “Hombre blanco sigue eligiendo hombre blanco”. También le parece curiosa la abundancia de mujeres en puestos donde la remuneración es baja (ONG, por ejemplo) y su escasez en los consejos de administración bien remunerados.
Bartz ha sido asaeteada por los analistas financieros de Wall Street (la especie quizás con mayor porcentaje de hombres) por sus escasas declaraciones durante el primer año de mandato. Acertijo: ¿Cuánto tarda un hombre en dar una entrevista después de su llegada a dirigir una empresa? Entre minutos y días.
Si en la vida laboral la mujer lo tiene difícil, en el tecnológico y científico parece que más. Apenas el 30% de los directivos de tecnología es de género femenino en el mundo y en España. Después de Bartz, casi nada. Ann Livermore es otra clásica de la industria de la tecnología. Si Bartz estuvo 20 años en Autodesk, Livermore lleva en HP 29. A sus 52 años es la vicepresidenta ejecutiva de la empresa, tercera en el escalafón. La tercera sería Safra Catz, presidenta de Oracle. Suena bien, pero teniendo por encima al fundador Larry Ellison, no tanto. Además, el pasado año, Ellison fichó al expulsado de HP, por faldero, Mark Hurd, y le dio su mismo cargo. Así que Catz manda menos que hace un año.
La AWIS, asociación de mujeres científicas, de EE UU anda estos días celebrando sus 40º años de vida. Y están muy contentas porque 2010 fue un gran año: la Academia Nacional de las Ciencias eligió a 15 mujeres de entre los nuevos 72 miembros, y en la Academia de Ingeniería el porcentaje de mujeres se ha cuadruplicado ¡guau¡…. del 1% al 4%. Por si sirve de consuelo (que no) por aquí andamos tan bien como en Estados Unidos. Vean si no este repaso a nuestras insignes y reales academias:
Real Academia de Ciencias Exactas: 45 miembros, hasta el pasado año solo una mujer, ahora dos.
Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras: 41 miembros, mujeres…1. Incluso hacen sitio para miembros que no son economistas ni financieros.
Real Academia Nacional de Medicina: 47 miembros, mujeres…1.
Real Academia de Bellas Artes de San Fernando: 69 miembros, mujeres…2.
Real Academia de la Historia: 34 miembros, mujeres…3.
Real Academia Española de Gastronomía: 26 miembros…..7 mujeres (27%). Ni en las cocinas reina la mujer, al menos para la Real Academia.
Reflexión: ¿Tendrá algo que ver la ausencia de mujeres con el desprestigio de tales asociaciones?
Otra Reflexión: Cuándo se reúnen, ¿Se sienten a gusto? ¿No notan algo extraño? ¿No ven que les falta, en instituciones teóricamente tan trascendentes la mitad de la humanidad? ¡Hombres, hombres! Mordemos por un cargo, por una foto, por una tarjeta con membrete.
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