El Gobierno vasco pide mantener la presión sobre ETA para que siga "en su punto de máxima debilidad"
Aralar exige la liberación de los detenidos para "no poner más piedras en el camino"
El Gobierno vasco, a través de dos de sus máximos responsables, ha mostrado su satisfacción por las detenciones de los supuestos miembros del aparato político internacional de ETA, Askapena. La portavoz del Ejecutivo, Idoia Mendia, ha recalcado la necesidad de mantener la actual política antiterrorista porque es la que ha llevado a la banda al "punto de máxima debilidad". El consejero de Interior, Rodolfo Ares, ha recordado que "las diversas policías no están en tregua". Aralar, por su parte, exigió la liberación de los detenidos.
"El único destino de los terroristas y de quienes les apoyan es responder de sus delitos ante la justicia", ha afirmado Ares. El responsable de Interior considera que "el mantenimiento de una línea de trabajo continua por parte de todos los cuerpos policiales contra ETA y todas las organizaciones de su entorno es la mejor garantía para caminar hacia el final de la violencia". El consejero se ha mostrado muy crítico en los últimos días con quienes hablan de mesas de partidos y de nuevo escenario, "haciendo política como si ETA hubiera desaparecido". Askapena, ha afirmado, "es una parte esencial del entramado de apoyo" a la banda terrorista.
En paralelo, El PP vasco dio una muestra más de su sintonía con la línea mantenida por los Gobiernos vasco y central. Su presidente, Antonio Basagoiti, ha calificado de "oportuna y muy pertinente" la operación realizada por el Cuerpo Nacional de Policía contra Askapena. El dirigente popular sostuvo que la vía policial "es mucho más práctiva y eficaz" para conseguir la paz "que 40 mesas, que 50 manifestaciones o que 40 textos como el de Gernika", en alusión a la declaración firmada, entre otros por EA, Batasuna y Aralar, reclamando un cese definitivo y verificable a la banda.
Semanas despúes de anunciar el cese de sus "acciones armadas ofensivas" negándole a su base social el cese definitivo que pide, ETA dio su visión de la situación en una entrevista el domingo en Gara: "Algunos, queriendo desvirtuar la apuesta política de la izquierda abertzale, quisieran ver en su diseño el equivocado deseo de adentrarse en la seudodemocracia española".
Por su parte, Aralar, partido que nació de una escisión de Batasuna al optar por vías no violentas, se mostró muy crítico con las detenciones. La formación ha exigido la puesta en libertad de los detenidos para no poner "más piedras en el camino" que la izquierda abertzale ilegalizada ha emprendido "hacia un escenario sin lucha político-militar".
En un comunicado, Aralar de Álava exige al Gobierno "que no utilice el falso argumento de que todo el MLNV es ETA" para, a su juicio, entorpecer el proceso. Askapena es una asociación conocida por su labor "exclusivamente política e internacionalista en la que "han participado muchos ciudadanos de Euskal Herria", según el partido dirigido por Patxi Zabaleta.
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