Montilla rechaza un cheque en blanco de Mas y le exige que trabaje en una reacción unitaria
El líder de CiU ofrece al presidente total apoyo aunque le reclama que haga suyo el lema de la manifestación
Los partidos catalanes que apoyan el Estatuto quieren llegar al viernes con una declaración unitaria que concluya el pleno monográfico que tratará de la sentencia. Pero el acuerdo dista de ser una realidad. Convergència i Unió tensó la cuerda el martes, deseoso de ejemplificar, una vez más, la división entre el PSOE y el PSC. Su líder, Artur Mas, ha rebajado el tono en la sesión de control. Si ayer le exigió que en la declaración unitaria se incluya el lema "Somos una nación. Tenemos derecho a decidir", hoy ha optado por buscar la imagen de partido responsables, ha rebajado sus expectativas y le ha ofrecido un cheque en blanco al presidente de la Generalitat, José Montilla: "Ustedes que son la mayoría y están en el Gobierno propongan una resolución. Nosotros se la votaremos", ha proclamado Mas recalcando la necesidad de unidad en el propio tripartito.
El líder de CiU no se esperaba la reacción de Montilla, que ha rechazado de pleno el ofrecimiento de los nacionalistas desgranando su definición de la unidad: "La unidad no es un escaparate para mostrar las posiciones propias. Unidad es un principio demasiado serio para dejarlo a los pies de estrategas de cortos vuelos". El presidente ha exigido a CiU que participe para hacer la mejor resolución posible: "Poner las cosas fáciles no es el objetivo. La política responsable no es hacer el más fácil, sino lo más útil, lo que sume, lo que avance, lo que transforme", ha respondido Montilla. Mas no daba crédito, y en una corta réplica ha implorado al presidente que, "como mínimo", le diera las gracias por su ofrecimiento. "Le agradezco que no pongan condiciones, pero venga con su propuesta. Tendrán alguna cosa a decir".
La sesión de control a José Montilla la han monopolizado las preguntas sobre la sentencia del Estatuto -es el primer pleno tras la publicación de la sentencia- y la manifestación. Montilla ha adoptado un tono trascendente, duro con el PP, al considerarlo el culpable de la situación actual, y con cantos permanentes a la unidad dirigidos a sus socios de Gobierno.
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