La Línea 5 recupera la normalidad

Los usuarios de la Línea 5 del metro verán mañana por fin acabadas las obras que han mantenido cerrado un tramo durante más de tres meses. El tres de agosto, la circulación entre las estaciones de Can Boixeres y Collblanc, ambas en L'Hospitalet de Llobregat, quedaba cerrada y sustituida por tres autobuses alternativos que acercaban a los pasajeros a otros transportes -para así facilitar la llegada a Barcelona- y a las estaciones intermedias, Pubilla Casas y Can Vidalet. El tramo de la línea 5 entre Horta y Vilapiscina, también cerrado durante el verano por las obras, se reabrió el pasado 18 de septiembre.

La solución propuesta por Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) para sustituir el acceso a las estaciones cerradas creó desconcierto en el primer momento e incomodidad en los viajeros durante el período que ha durado las obras. Efectivos para acercar a los usuarios a las estaciones de Renfe y el tranvía, los autobuses alternativos demoraban el viaje a los pasajeros que debían acceder a las estaciones cerradas o querían continuar en la misma línea cinco. Para cubrir el tramo cerrado, entre Can Boixeres y Collblanc, se debían combinar dos autobuses; para ir a Can Vidalet eran necesarios tres, y un trayecto de seis minutos pasaba a durar más de cuarenta.

A las 5.00 horas de mañana se restablecerá la circulación. TMB ha avanzado durante estos tres meses dos proyectos en marcha: el nuevo vestíbulo para la estación de Can Vidalet, que mejorará sus accesos para las personas con movilidad reducida y la estructura de la futura estación de Ernest Lluch, que se situará entre Pubilla Casas y Collblanc. La inversión de ambas obras asciende a 48 millones de euros, y se prevé que estén terminadas en 2011.