Montilla llama a centrarse en la crisis y a "no hacer inventos"

Cada cosa en su momento. Y el actual, en plena tormenta económica, no es el adecuado para dar alas a aspiraciones soberanistas ni a declaraciones de trazo grueso. El presidente de la Generalitat, José Montilla, ha abierto con este tono el debate de orientación política del Parlamento catalán. Montilla ha centrado su discurso en lanzar un mensaje optimista sobre el futuro de la economía y, en pleno debate por las consultas soberanistas impulsados en diferentes municipios catalanes ha pedido a todos los partidos que eviten coger esta senda y que defiendan a capa y espada el Estatuto. "No es tiempo de aventuras ni de sorpresas, no estamos por inventos", ha concluido.

En un discurso de una hora y cuarenta minutos, el presidente de la Generalitat ha querido dejar claro que su apuesta ha sido y sigue siendo la de desplegar la carta autonómica. No ha menospreciado la espada de Damocles que significa para su Gobierno la futura sentencia del Tribunal Constitucional, pero ha dicho que su obligación es defender la constitucionalidad del Estatuto y actuar en este sentido. "No tiene sentido actuar como si ya hubiera habido una sentencia negativa".

El presidente de la Generalitat ha pedido al resto de partidos que actúen igual y se ha distanciado de sus socios de Esquerra Republicana de Catalunya al reafirmar que él sigue creyendo en la senda marcada por el Estatuto.

Situación económica

La situación económica ha sido el eje central de su discurso. El presidente no ha anunciado ninguna medida de impacto, pero ha dejado claro que piensa ampliar los recursos para la formación de parados y que su gobierno está ultimando ayudas suplementarias a los ayuntamientos, las administraciones que más están sufriendo la crisis económica.

Montilla también ha recordado el éxito del acuerdo de financiación autonómica, pero ha admitido que el incremento de recursos se notará poco a causa de la bajada en la recaudación de impuestos. Por eso se ha comprometido a implantar nuevas medidas de austeridad. También se ha referido a la polémica por el encargo de informes superfluos efectuado por su gobierno y que la oposición está utilizando para denunciar un "derroche masivo". Montilla ha asegurado, sin dar cifras que su gobierno seguirá disminuyendo el gasto en informes.

El de hoy es el último debate de orientación política de esta legislatura y Montilla ha querido fijar el rumbo de su gobierno para encarar las elecciones. Ha hecho una declaración de principios: no utilizar la crisis económica y los apuros de los ciudadanos para prometer cosas irrealizables o hacer populismo. "Quien utilice la crisis económica con fines electoralistas se equivocará", ha asegurado.