Mario, ganador de Operación Triunfo
La final pierde espectadores respecto a otras ediciones, obtuvo sólo un 19% de cuota de pantalla
A pesar de la escasa audiencia que Operación Triunfo ha cosechado durante toda su séptima edición, la más baja desde que el concurso se emite en Telecinco, el talent show se impuso como primera opción de la noche en su gran final. Con un 19% de cuota de pantalla, el concurso fue seguido por 2.268.000 espectadores, testigos todos ellos de como el asturiano Mario, se convertía en el ganador del concurso.
En el último programa, todo los participantes de la séptima edición estuvieron presentes y participaron con sus canciones en una gala en la que actuó la británica Alesha Dixon como estrella invitada.
No obstante, las intervenciones conjuntas de los triunfitos y tres intervenciones de cada finalista (Mario, Brenda y Jon) no lograron enganchar a los seguidores habituales del programa. De hecho, la de este martes fue la final menos vista de la historia de OT.
El espacio presentado por Jesús Vázquez perdió medio punto con respecto a la gala de la semana pasada, apenas nada si se compara con los más de 15 puntos de cuota de pantalla que diferencian esta gala final con la emitida en 2008, que vieron 4.284.000 de personas (34,4%).
Pese a ello, Telecinco lideró el late night aunque no el horario de máxima audiencia, una franja que estuvo muy reñida entre todas las cadenas. Españoles por el mundo, en Televisión Española, obtuvo un 17,2% de cuota de pantalla y más de dos millones y medio de espectadores. Le siguió Antena 3, que consiguió reunir ante el televisor a 2.242.000 espectadores con El peliculón, protagonizado por Bruce Willis, Lágrimas al sol. Muy buena aceptación tuvo también la segunda parte de la película Los Jackson, que emitió Cuatro. Obtuvo un 13,3 % de cuota de pantalla y 1.602.000 espectadores.
