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El secretario de Estado de Piqué "no recuerda" el informe de los vuelos a Guantánamo

El documento, "muy secreto", que pasó por sus manos, informaba al Gobierno sobre el uso de aeropuertos españoles por EE UU para trasladar presos

Miquel Nadal, secretario de Estado de Exteriores cuando Josep Piqué era ministro, no recuerda el documento "muy secreto" en el que se comunicaba al Gobierno español que EE UU solicitaba utilizar bases españolas para el traslado de presos a la prisión ilegal de Guantánamo. El ex número dos del ministerio, que ha declarado hoy ante el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno, recibió presuntamente en mano el informe que demuestra que el Gobierno de José María Aznar conocía que aviones estadounidenses llevaban prisioneros ilegales y lo trasladó al ministro.

Nadal asegura que no recuerda "que nada relacionado con este asunto le llegara a él". Tampoco retiene en su memoria que trasmitiese información relacionada con ese documento. A preguntas del juez, aseguró que no le constaba que aeronaves norteamericanas realizaran escalas en bases españolas trasladando a detenidos. La falta de memoria llega hasta el punto de que no se acuerda de si estaba en Madrid el 10 de enero de 2002, cuando presuntamente se le entregó el documento.

El ex director general para América del Norte, Miguel Aguirre de Cárcer, aseguró el pasado diciembre ante el juez Moreno que dicho informe era auténtico, que él fue el que lo redactó y que, acto seguido, se lo dio a Nadal para que lo pusiera en conocimiento del ministro.

El segundo en pasar por el despacho del juez fue un brigada que, en el período en que se produjeron los vuelos, desempeñaba labores de controlador aéreo en la base de Rota. Aseguró que en varias ocasiones se les comunicó, mediante "un documento diplomático", que los aviones de EE UU transportaban "carga peligrosa". En esos casos, lo que se hacía era estacionar los aviones en una zona reservada para mercancías peligrosas específica para EE UU y terceros países, pero los funcionarios españoles no verificaban la carga. En todo caso, no le consta que los americanos hubieran utilizado ese procedimiento para el traslado de detenidos o presos.

A preguntas de los letrados, el brigada explicó que el área en la que se estacionaban los aviones con cargas peligrosas es de responsabilidad de los militares estadounidenses. "No hay funcionarios españoles, todo lo llevan Interjet y la US Navy (la armada de EE UU)", aseguró. Y añadió que no hay visibilidad de esa zona, que se encuentra a unos dos kilómetros de la torre de control.

El controlador de Rota también manifestó que era frecuente que hubiera vuelos de Afganistán e Irak, unos 15 o 20 al día, pero no recuerda si hubo algún vuelo procedente de Cuba. Tampoco se acuerda de si todos los aviones procedentes de esos países se estacionaban en la zona controlada por los estadounidenses.

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