Un pesquero de Santa Pola rescata a 49 inmigrantes a cien millas de Trípoli

El pesquero Clot de l'Illot, con base en Santa Pola, ha rescatado a algo más de cien millas de Trípoli, en aguas internacionales, a 49 inmigrantes, entre ellos varias mujeres y niños, y permanece a una milla del puerto de esta ciudad desde medio día, a la espera de que se autorice el desembarco, han informado el presidente de la Cofradía de Pescadores de Santa Pola, José Ramón García Fuentes, y José Ruso, padre del patrón del pesquero.

Ruso ha añadido que entre los inmigrantes hay algunos que están en muy mal estado de salud y dos de ellos han tenido que ser evacuados en helicóptero para ser atendidos por personal sanitario. Además ha advertido que la tripulación del pesquero, que salió del puerto de Santa Pola el pasado 18 de julio, se ha quedado ya sin agua y de que apenas les quedan alimentos.

Enganchados a una boya del barco

El rescate se produjo el miércoles por la mañana, cuando los tripulantes del "Clot de l'Illot" vieron una patera enganchada a una boya de la embarcación, que utilizan para sujetar las redes de pesca. Se encontraban en aguas internacionales, a medio camino entre Libia y Malta. En un primer momento, los tripulantes del pesquero, once en total, se pusieron en contacto con la patrulla costera italiana de la isla de Lampedusa, por ser la más próxima al lugar. Las autoridades italianas les dijeron inicialmente que acudirían a socorrer a los inmigrantes, pero sobre las tres de la tarde les informaron de que no lo harían porque "no estaban bajo su jurisdicción".

Los pescadores decidieron entonces subir a bordo a los 49 inmigrantes supervivientes, entre los que hay "5 ó 6 menores y 2 chicas", y les dieron de comer y beber, ha añadido Ruso, quien ha comentado que "estaban medio muertos" y que, al menos, "habían fallecido diez más".

García Fuentes ha añadido que Salvamento Marítimo y la Embajada española están realizando gestiones para que las autoridades libias autoricen el desembarco de los inmigrantes. También se espera la llegada de una patrullera con escolta, porque algunos de los inmigrantes "están nerviosos y no quieren bajar al puerto", ha asegurado Ruso.