Cuatro años y medio de cárcel para el joven que dejó en coma a un urbano

La Audiencia de Barcelona ha condenado a tres jóvenes por la agresión cometida contra un guardia urbano de la ciudad, padre de cuatro hijos, que quedó en "estado vegetativo persistente" hace dos años. El tribunal impone cuatro años y medio de cárcel a Rodrigo Lanza Huidobro, por un delito de atentado en relación con otro delito de lesiones. La sentencia asegura que "no existe la más mínima duda" de que él arrojó una piedra del tamaño de una mano al policía a una distancia de unos 10 metros.

Del mismo modo, el tribunal de la Sección Octava de la Audiencia de Barcelona condena a tres años y tres meses de cárcel a Alex Cisternas Amestica y Juan Daniel Pintos como coautores de la agresión. La sentencia asegura que estos jóvenes se concertaron con Lanza y encabezaron un grupo de 20 personas que "armado con piedras, palos y botellas", se enfrentó a la policía.

Los hechos sucedieron la madrugada del 4 de febrero en la calle Sant Pere més baix, cuando varias patrullas de la Guardia Urbana de Barcelona acudieron a una casa okupa en la que se celebraba una fiesta después de que se rompiera el precinto municipal. Los agentes intentaron impedir el acceso a más jóvenes y fue en esa acción cuando se produjo la agresión.

Recibió el impacto de una segunda piedra

La sentencia relata que la piedra arrojada por Lanza impactó en la frente del policía y que éste cayó al suelo. Cuando estaba tendido en el asfalto, el policía recibió el impacto de otra piedra arrojada por Cisternas, relata la sentencia, aunque el tribunal precisa que ignora la dimensión de esa segunda piedra, la intensidad del lanzamiento y si le provocó alguna lesión al policía.

En cuanto a Juan Daniel Pintos, los jueces afirman que estaba al lado de Lanza y Cisternas y que les alentaba a continuar con la agresión con expresiones como "perro cabrón, nos lo hemos cargado".

Al mismo tiempo, el resto de integrantes del grupo arrojaron todo tipo de objetos a la policía, como una valla metálica, botellas, piedras y latas de bebidas. Tres agentes sufrieron diversas heridas por esos enfrentamientos y por ello el tribunal condena a otros tres años y tres meses de cárcel a Alfredo Carlos Pestana Mota, a tres años de cárcel a Patricia Heras Méndez y a penas de un año de prisión para otros seis jóvenes.