Ya es Navidad

El Ayuntamiento de Madrid ha apretado esta tarde el botón de encendido en el alumbrado navideño, un mes antes de la Navidad. Como paso previo, se han proyectado contra la fechada del Palacio de Cibeles los motivos con los que se adornará la ciudad durante estos días. Cuando ha terminado, se ha producido una cuenta atrás de 30 segundos, tras los cuales se han encendido simultáneamente casi nueve millones de lámparas en 150 espacios públicos distribuidos por toda la ciudad, entre calles, plazas o edificios. No se apagarán hasta el 6 de enero.

Las principales novedades y diseños están en la calle de Velázquez, donde el modisto Juan Duyos ha creado un collage de palabras y símbolos, y en la calle de Serrano, que luce un paisaje luminoso creado por Amaya Arzuaga mediante líneas geométricas. También se estrenan los 23 cerezos en flor artificiales que se han colocado entre la glorieta de Atocha, el Museo del Prado y el Salón de Pinos. Los hay de 4, 6 y 8 metros y de tres colores, blanco, azul y rosa. En Cuzco se iluminan, en tono magenta, algunos de los pinos naturales situados en la plaza. El recorrido por estos nuevos diseños continúa por la calle de Alcalá, en el tramo entre la plaza de la Independencia y Cibeles, donde el diseñador gráfico Roberto Turégano prolonga, mediante luces amarillas y azules, las ramas de los árboles.

En el paseo de Recoletos, los arquitectos Ben Busche e Isabel Barbas se han inspirado en los reflejos y brillos de los cristales de hielo bajo la luz del sol invernal para diseñar unos elementos fabricados en hilo luminoso de color blanco, que cuelgan de una malla horizontal a alturas aleatorias, generando una atmósfera cambiante y dinámica. La iluminación navideña no olvida la aspiración olímpica de Madrid. Así, sobre la fachada del Palacio de Telecomunicaciones se proyecta el logo diseñado por Joaquín Mallo y representado por una estructura de cuatro metros de alto por seis de ancho fabricado en una combinación de hilo luminoso y microbombillas.

900 toneladas de CO2

En las bocacalles que dan acceso a la Puerta del Sol se han colocado diseños que evocan alas angelicales. El Belén luminoso que el pasado año se instaló en la Puerta de Alcalá se amplía en esta ocasión con la colocación de dos grandes pórticos con ángeles en los arcos contiguos al central. La iluminación incluye la recolocación de diseños de las navidades anteriores en otros espacios, como el Paseo del Prado, que lucirá la decoración instalada en 2006 en el Paseo de Recoletos. La Gran Vía, la plaza Mayor y la calle de Tirso de Molina repiten la misma decoración, como las calles de Goya y de Ortega y Gasset, en las que se amplía el tramo iluminado.

El Ayuntamiento ha instalado 25 abetos artificiales. El de mayores dimensiones, diseñado por Agatha Ruiz de la Prada, está ubicado en el entorno del río Manzanares, frente al Palacio Real. Según el Ayuntamiento, las lámparas instaladas cumplen con los requisitos de respeto al medio ambiente y eficiencia energética, y que, aunque son más que el año pasado, consumen un 8% menos. Del 26 de noviembre al 23 de diciembre las luces permanecerán encendidas de 18.00 a 22.00 horas, y del 24 de diciembre al 6 de enero, de 18.00 a 24.00 horas. Los días 24, 25 y 31 de diciembre y 1 y 5 de enero el encendido se prolongará hasta las 7 de la mañana.

Según los cálculos el coordinador de Energía de Ecologistas en Acción, Javier González., Madrid emitirá alrededor de 900 toneladas de CO2 a la atmósfera esta Navidad para iluminar sus calles. Este experto declaró a Servimedia que las casi nueve millones de lámparas gastarán 1.848.000 kilovatios de energía en las 231 horas que permanecerán encendidas, incluido el 8% menos de energía que el Ayuntamiento dice que consumirá en estas fiestas.

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