Mil euros por una identidad falsa

Entre 600 y 1.000 euros por una carta de identidad -portuguesa o italiana- o una tarjeta de residencia para extranjeros. Éste era el precio que la red desarticulada por la Policía Nacional cobraba a los inmigrantes -en su mayoría suramericanos- interesados en adquirir uno de esos documentos falsificados.

En la operación policial, desarrollada desde el pasado mes de abril por la Unidad Contra Redes de Inmigración y Falsificación y la Brigada Provincial de Extranjería de Madrid, han sido intervenidos numerosos documentos adulterados portugueses, españoles e italianos, así como útiles y efectos preparados para las falsificaciones, según ha informado la Dirección General de la Policía.

Los documentos adulterados iban destinados, en su mayoría, a ciudadanos suramericanos en situación irregular en España, que de este modo aparentaban ser portugueses y accedían al mercado laboral como comunitarios.

Las primeras gestiones policiales dieron como resultado la detención de dos miembros del grupo, Marcos Roberto D.R., de 31 años, y William R.S., de 27, encargados de la distribución y cobro de los documentos falsos. Posteriormente fue arrestado Francisco C.N., de 33 años, en cuyo domicilio fueron intervenidos numerosos documentos falsos y medios técnicos y materiales para su producción, y otros dos colaboradores, Marcelo R.C., de 31 años, y Edson S.L., de 32.

En el registro practicado en uno de los domicilios, en Madrid, fue encontrado, entre otros muchos objetos, un cuaderno con anotaciones de identidades y precios y diversos documentos en proceso de elaboración con distintas identidades.