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El crucero averiado entre Baleares y Cerdeña recupera sus motores y pone rumbo a puerto

El buque había sufrido daños en las máquinas debido a la fuerte tormenta

Finalmente, el Grand Voyager, podrá regresar a puerto por sus propios medios. La tripulación del crucero, que hoy había lanzado una señal de alerta por una avería en los motores mientras navegaba entre Baleares y Cerdeña con más de 700 pasajeros a bordo, ha logrado reactivar manualmente dos de los cuatro motores, lo que le ha permitido poner rumbo al puerto de Cagliari (Cerdeña).

El Grand Voyager realizaba el recorrido entre Túnez y Barcelona cuando se vio sorprendido por una fuerte tormenta que provocó daños en algunos de sus motores. Hacia las diez de la mañana, el buque, con 732 personas a bordo, la mayoría de ellas turistas españoles, ha emitido una señal de alerta, cuando se encontraba a unos 100 kilómetros de Menorca, puerto que había descartado como refugio por el mal tiempo. Tras la alerta, las autoridades marítimas francesas y españolas han lanzado una operación de rescate. Pese a ello, la operadora del barco, Iberojet, aseguraba que la situación estaba "bajo control", ya que el viento había causado daños en las máquinas pero el motor principal estaba intacto y podía mantener el rumbo, aunque reconocía que crucero buscaba un puerto donde atracar.

Francia había activado un plan de rescate en "estrecha colaboración" con las autoridades marítimas españolas, enviando a la zona dos remolcadores, uno desde Valencia y otro desde Palma de Mallorca. Un avión de patrulla de la marina francesa y otro del servicio de aduanas, que llevaban a cabo operaciones de entrenamiento y vigilancia frente a las islas Baleares, participaban también en las tareas de rescate, al igual que un remolcador francés, dos helicópteros españoles y el Gimmi, un carguero británico de gas, que respondió a la señal de alerta.

Mañana estará en Cagliari

Horas después, sin embargo, la tripulación ha logrado reactivar manualmente dos de los cuatro motores del buque, lo que le ha permitido poner dirección al puerto de Cagliari (Cerdeña), a una velocidad que oscila de los 10 a los 12 nudos. Según han informado fuentes de Salvamento Marítimo y la red internacional MTI, especializada en la gestión de las averías y accidentes en alta mar, el pasaje y la tripulación del barco se encuentran en buen estado y no será precisa su evacuación, aunque puede haber algún herido leve, como consecuencia del fuerte oleaje que azota esta parte del Mediterráneo. Está previsto que el Grand Voyager, arribe en las primeras horas de mañana a Cagliari, según la MTI.

El Voyager, con bandera de Bahamas, parece haber sufrido daños en algunas de sus maquinas debido a la fuerte tormenta que azota la zona, pero un motor funcionaba aún, con lo que era capaz de mantener el rumbo, según la Prefectura (delegación del Gobierno). Por ello, las autoridades marítimas puntualizaban que el barco está en "una situación difícil, pero no a la deriva".

El tráfico marítimo en Baleares se ha visto hoy seriamente afectado por las condiciones meteorológicas. Los fuertes vientos que azotan la comunidad desde la pasada noche han originado la suspensión del tráfico marítimo en Menorca y la cancelación de tres trayectos en los puertos de Palma, Alcudia e Ibiza.

Vista aérea del crucero <i>Grand Voyager</i> luchando con las olas en aguas del mar Mediterráneo.
Vista aérea del crucero Grand Voyager luchando con las olas en aguas del mar Mediterráneo.REUTERS

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