Controlado el incendio que ha arrasado Huelva y Sevilla

El incendio que ha arrasado más de 26.500 hectáreas en las provincias de Huelva y Sevilla desde el pasado martes, y provocado la muerte de un matrimonio sevillano, ha podido ser controlado esta mañana a primera hora. En todo caso, no será hasta el domingo cuando el fuego esté completamente sofocado, según los cálculos del dispositivo andaluz de lucha contra los incendios (Plan Infoca).

Desde el comienzo del día, los medios aéreos se están concentrando en apagar los "puntos calientes" que todavía arden, mientras que el personal de tierra intenta refrescar las zonas ya extingidas y evitar la aparición de nuevos focos. Los últimos frentes se sitúan en en el paraje natural de La Pata del Caballo, en el término municipal de Escacena (Huelva), y en El Madroño, El Garrobo y Castillo de las Guardas (Sevilla), según han informado fuentes del Infoca, que no han ocultado su optimismo por la pronta extinción del fuego. Todavía queda el peligro residual que supone el viento y las altas temperaturas, por lo que no se puede avanzar con exactitud cuándo podrá darse por sofocado. Por ello, en la zona afectada las espadas siguen en alto, con un dispositivo formado por 20 técnicos y agentes de Medio Ambiente, 182 especialistas en extinción, 12 autobombas, 3 avionetas, 5 helicópteros y tres más de gran capacidad, ayudados en tierra por 20 maquinas pesadas.

Catástrofe

Este incendio es el mayor sufrido en Andalucía desde 1991, cuando en dos días de agosto ardieron 10.346 hectáreas en Canjáyar (Almería), menos de la mitad de la superficie quemada en los últimos tres días en una decena de localidades de Sevilla y Huelva, lo que da idea de la magnitud y la velocidad que ha alcanzado el fuego iniciado el martes en Minas de Riotinto (Huelva) por causas aún desconocidas, aunque de origen intencionado.

Ni el Plan Infoca, ni el Seprona de la Guardia Civil adelantaron ayer resultados sobre sus líneas de investigación ni han practicado detenciones relacionadas con el suceso. Algunas pruebas determinantes, como las inspecciones sobre el terreno, dependen de la extinción del fuego y de la normalización de la temperatura en la zona, según fuentes de la Guardia Civil. "Hay zonas donde se puede entrar, pero no en otras, y nuestra prioridad ahora es la vida de las personas", indicaron.

Manuel Chaves anunció ayer que su Gobierno destinará 700.000 euros a fondo perdido para pagar a los afectados por el fuego. La Junta también compensará a los ayuntamientos por los gastos generados por los realojos y concederá créditos blandos para reparar daños sufridos por agricultores, ganaderos y empresarios turísticos. Estas medidas fueron calificadas ayer durante su visita a la zona por el presidente del Partido Popular andaluz, Javier Arenas, de "insuficientes" y "precipitadas".