Francia se prepara para la gran marea negra tras la aparición de las primeras manchas
Las autoridades francesas confirman que las "pastillas" de hidrocarburo descubiertas ayer en playas de las Landas proceden del petrolero.- La mancha principal se encuentra ya a 160 millas del país vecino
La Prefectura Marítima del Atlántico en Brest, al noroeste de Francia, ha confirmado que las "pastillas" de hidrocarburos detectadas ayer por la tarde en playas al sur de Biscarosse, en la región de las Landas, proceden del fuel vertido por el Prestige. Los análisis, realizados por dos laboratorios -el Laboratorio de Análisis de Vigilancia y Peritaje de la Marina (LASEM) y el Centro de Documentación, Investigación y Experimentación de Contaminaciones Accidentales de las Aguas (CEDRE)-, demuestran que, como se temía, la marea negra ha llegado a Francia arrasatrada por los vientos casi mes y medio después del hundimiento del petrolero en aguas gallegas.
Según ha explicado el portavoz de la prefectura, Sylvain Le Berre, esta contaminación "residual y difusa" es parte del fuel vertido por el Prestige antes de hundirse el pasado 19 de noviembre. Las manchas han bordeado las costas españolas y llegado a las Landas entre dos aguas y, por tanto sin ser detectadas por los vuelos diarios de observación de las Aduanas y la Armada francesas.
El temor es que estas manchas sean tan sólo la antesala de una pesadilla mayor: la llegada del grueso de la contaminación, que está en el Golfo de Vizcaya, donde hoy se han localizado placas de fuel a unos 200 kilómetros (160 millas) de la costa francesa. Esas placas grandes de chapapote, empujadas por fuertes vientos, se desplazan a razón de unos 40 kilómetros al día.
Un chapapote menos consistente
Se trata de petróleo "no fresco y emulsionado", de color marrón-chocolate, que "a priori" no tiene exactamente la misma consistencia que el de la marea negra que ha golpeado las costas de Galicia, aunque sigue estando "relativamente compacto", según Le Berre. "Nuestra prioridad es evitar que esa contaminación llegue hasta la costa", ha subrayado el portavoz, para añadir que, si las condiciones meteorológicas lo permiten -en este momento "pésimas"-, Francia "enviará importantes medios" para tratar de recoger los hidrocarburos en el mar.
En Francia también aguarda el resultado del análisis de pequeñas manchas avistadas hoy cerca de la Isla de Ré, a la altura de La Rochelle (oeste), y de otras encontradas sobre tres kilómetros de playa del Cabo Ferret, justo al sur de Burdeos, para ver si también proceden del fuel Prestige o de barcos que limpiaron sus bodegas. Mientras, la recogida de las bolitas de fuel halladas sobre unos 12 kilómetros de playa de las Landas, entre las localidades de Biscarosse y Mimizan, ha tenido que interrumpirse a primera hora de la tarde a causa de la marea alta y se reanudará por la mañana.
A comienzos del mes pasado, Francia activó los planes Polmar mar y tierra, que permiten movilizar todos los equipos de las administraciones públicas y requisar medios privados para combatir la contaminación en el mar y en tierra. Y, en el marco de las medidas acordadas con España a raíz del aciago naufragio, Francia ya ha expulsado o prohibido la entrada en su zona económica exclusiva (200 millas) a varios petroleros monocasco de más de 15 años de servicio. Además, España y Francia han puesto en marcha el plan de acción conjunta Golfo de Vizcaya para casos de emergencia marítima. Así, en el Centro de Coordinación de Salvamento Marítima de A Coruña se ha destacado un oficial de enlace francés para evaluar la situación.
Uvas con chapapote
Las cadenas humanas de voluntarios y miembros del Ejército, unas 5.100 personas, han vuelto hoy al trabajo de limpieza de las costas tras pasar la noche de Fin de Año lejos de sus casas y en compañía de sus anfitriones. Pese a que el mal tiempo mantiene paralizada la actividad de los buques, se han extraído 21.672 metros cúbicos de sólidos y aguas oleosas.
Del total del personal movilizado en la lucha contra el chapapote, 4.300 personas se encuentran en Galicia, 216 en Asturias (donde ya hay 27 playas afectadas por el vertido), 32 en Cantabria y 16 en el País Vasco. En cuanto al tiempo, las condiciones del viento, con dirección entre sur y oeste, continuarán durante al menos los primeros 7-8 días del año, según la predicción de MeteoGalicia.
La intensidad predominante será fuerte, con períodos en los que disminuirá a moderado. De esta forma, las labores de limpieza se verán muy dificultadas, principalmente en el mar, mientras las manchas continuarán con la misma trayectoria de jornadas anteriores: hacia Francia.
