La derecha de Chirac logra la mayoría absoluta en la Asamblea francesa

Se esperaba que el centroderecha obtuviese la mayoría absoluta en la segunda vuelta de las elecciones legislativas celebradas ayer en Francia, y así ha sido. A falta de 12 escaños por adjudicar, la Unión por la Mayoría Presidencial del presidente Jacques Chirac ha conseguido hasta el momento 349 diputados, y la mayoría absoluta por tanto en una cámara de 577 asientos, según datos del Ministerio de Interior.

Las cifras oficiales indican que la derecha suma hasta el momento 392 escaños, frente a los 173 de la izquierda. La cámara saliente, elegida en 1997, contaba con 319 diputados de izquierda y 258 de derecha. Con los resultados de hoy, son ya seis las veces consecutivas desde 1981 en que una mayoría es derrotada y reemplazada por otra de signo contrario.

Este resultado pone fin a cinco años de cohabitación, toda vez que Chirac también ganó las presidenciales celebradas hace menos de un mes. El descalabro de la izquierda, que ya se hizo patente entonces, cuando Jospin ni siquiera pudo disputar la segunda vuelta al ser desplazado por el ultraderechista Le Pen, se ha vuelto ha repetir hoy aunque con menor magnitud de lo que se esperaba.

Le Pen, expulsado

Sin embargo, pese a haber salvado los muebles, la izquierda se ha dejado en el camino a varios de sus dirigentes más prominentes. El líder de los comunistas, Robert Hue, no ha logrado revalidar su escaño en el suburbio parisino de Val-d'Oise, como tampoco lo han conseguido en sus circunscripciones correspondientes Martine Aubry, la ex alcaldesa de Lille y madre de las 35 horas laborales; Dominique Voynet, la número uno de los Verdes (que han sumado tres escaños); y Jean-Pierre Chevenement, el presidente del Polo republicano, que había sido reelegido de forma ininterrumpida en su feudo de Belfort desde 1973.

Cuatro de cada diez

La abstención ha marcado un nuevo récord al sobrepasar el 39%, frente al 35,59 de la primera vuelta. Es decir, casi cuatro de cada diez franceses no acudió ayer a las urnas.

Tras el triunfo arrollador del centro-derecha, que había pedido a los ciudadanos una "verdadera" mayoría "clara y coherente" para aplicar su programa, Chirac contará con el control del Elíseo, del Senado y de la Cámara Baja por cinco años.

"Tenemos la obligación de no defraudar", ha manifestado el primer ministro Jean-Pierre Raffarin, elegido el pasado 6 de mayo y que hoy presentará su dimisión a Chirac para ser reelegido previsiblemente en breve. Raffarin, de 53 años, ha añadido que ha "oído el mensaje de los franceses".

Otra consecuencia notable de estas elecciones es la bipolarización que ha sufrido el Parlamento: la UMP y los socialistas, cada uno a un lado del hemiciclo, coparán a partir del próximo día 25 el 90% de los escaños.