Desarticulada una red de tráfico de drogas dirigida por una mujer de 61 años y su hija

Efectivos del Cuerpo Nacional de Policía han desarticulado en Santander una red de tráfico de drogas dirigida por una mujer de 61 años y su hija de 34. En la operación se ha detenido a nueve personas y se han intervenido 300 gramos de cocaína, seis cartillas bancarias con 69.000 euros y un coche marca Mercedes valorado en 36.000 euros.

Las investigaciones se iniciaron a finales del año pasado y condujeron a la identificación de Josefina S.M., alias Fina, como cabecilla de la red, y de su hija Sonia S.M., que distribuían la droga que adquirían en Valladolid desde su casa de la calle Antonio López.

Posteriormente, se descubrió el coche en el que la primera viajaba a la capital castellanoleonesa dos veces al mes para comprar la cocaína y que guardaba en un garaje muy alejado de su domicilio de Santander.

Pese a sus precauciones, se averiguó que el grupo surtía a un grupo de clientes de mediana edad y en apariencia no relacionados con el mundo de la droga. De hecho, tanto las detenidas como estos últimos carecen de antecedentes.

La principal acusada encubría su actividad aparentando trabajar en una empresa de la localidad de Revilla, en la que está dada de alta, y posee un importante patrimonio, compuesto por tres pisos, un garaje y un trastero en Santander, además de la citada cantidad de dinero repartida en varias cartillas, todo ello producto supuestamente del tráfico de drogas.

Una vez obtenidas las pruebas que las implicaban en el caso se detuvo a las dos mujeres y a otras siete personas, que han quedado en libertad tras prestar declaración, y se realizaron tres registros en lugares propiedad de la familia de las dos mujeres, donde se encontraron tanto la droga como el resto de objetos intervenidos.

Según la Policía, con estas detenciones desaparece un "importante punto negro" de tráfico de drogas, que tenía una actividad continua. Con la droga incautada se hubieran puesto en el mercado unas 4.000 dosis de cocaína.