El "uso incorrecto" de una cocina de gas pudo causar el derrumbe de Barcelona

El "uso incorrecto" o la "manipulación" de una cocina de gas natural puede haber sido la causa de la explosión que ayer provocó el hundimiento de un edificio en el barrio de Horta de Barcelona, en el que han muerto tres personas, otras diez han resultado heridas de diversa consideración y 48 familias han tenido que ser desalojadas.

Según ha informado el director de comunicación de Gas Natural, Jaume Giró, sus técnicos han detectado "indicios claros" de un uso incorrecto o de un intento de manipulación de una cocina, que ha sido encontrada con un giro de 180 grados sobre su posición normal. "La posición de la cocina no hace pensar en que se moviera por el efecto de la explosión", ha subrayado.

Giró, que no ha precisado la planta donde se produjo la fuga porque el caso esta bajo investigación judicial, ha señalado que este uso incorrecto de la cocina originó a su vez una fuga de gas que, al acumularse, causó la deflagración.

La red, revisada y sin anomalías

El responsable de Gas Natural ha informado de que la red de distribución general del gas y la red del edificio, cuya responsabilidad corresponde a la compañía, fueron revisadas en mayo de 2001 sin detectar ninguna anomalía. Además, ha descartado por completo que unas obras en la red general que efectúan en una calle paralela a Eduard Toda, donde se produjo el derrumbe, tenga relación con la explosión.

Un equipo de los bomberos de Barcelona, de la policía y de técnicos de Gas Natural se mantiene frente al edificio desplomado, en el número 90 de la calle de Eduard Toda del barrio de Horta de Barcelona, buscando pistas entre los escombros para concretar la causa exacta del siniestro.

La explosión en el edificio, de cuatro plantas, se produjo hacia las 15.40 horas y también afectó a los dos edificios contiguos, que sufrieron pequeños destrozos, lo que ha obligado a desalojar a 48 familias como medida preventiva.

Nueva horas bajo los escombros

El balance del siniestro es de tres personas muertas: Francisco Mulero, de 27 años; su abuela, Beatriz Rodríguez; y Miguel Gil, de 66. Asimismo, seis personas han resultado heridas leves y atendidas en el hospital de campaña instalado en la calle Eduard Toda, dos más fueron trasladadas al Hospital de la Esperanza y dados de alta anoche. Sólo dos heridos permanecen ingresados en el Hospital de la Valle de Hebrón.

Se trata de Pascual Murri, de 77 años; y de María del Carmen Costa, de 49, rescatada esta madrugada con vida entre los escombros tras pasar nueve horas bajo un sofá en la planta baja.

Pascual M. I. se encuentra en la UCI con un traumatismo craneoencefálico leve, la fractura de varios huesos, además de heridas en la rótula y en el tercer dedo de la mano, según informaron fuentes del centro hospitalario. Su pronóstico es grave aunque se encuentra estable.

Por su parte, la mujer que fue rescatada con vida a última hora de ayer entre las ruinas del edificio permanece ingresada en la unidad de quemados del mismo centro en estado grave, aunque se le siguen realizando pruebas.